Lituania: un gran clásico del continente que siempre está ahí
Encadena dos platas seguidas. Equipo peligroso con Valanciunas como ancla, Kalnietis como director y Maciulis como jugador más veterano.
Los dos últimos campeonatos de Europa han tenido el mismo patrón: una semifinal España-Francia tremenda cuyo vencedor ha salido propulsado hacia el título, en ambos casos (Francia en 2013, España en 2015) con un excelente nivel en la final. Y ambas finales, contra Lituania. La Selección que se empeñó en estar en Barcelona 92 después de que bastiones de la Unión Soviética (Sabonis, Kurtinaitis, Marciulionis…) expresaran su deseo de jugar como Lituania una vez que se selló su independencia en 1990. Desde entonces, ha sido una de las selecciones de referencia en Europa, siempre competitiva más allá de los nombres que la han formado. Un equipo experto, duro y que sabe jugar partidos importantes. En 2015 fue plata después de frustrar a Serbia en semifinales pero en los Juegos de Río no pasó del séptimo puesto. Ahora es favorita para ser primera de grupo (y más tras la lesión de Gallinari en Italia) con un bloque compacto y de sobra conocido por cualquier aficionado, con Valanciunas como ancla, Kalnietis como director y killer y Maciulis como jugador más veterano (32 años). El alero del Real Madrid puede salir del torneo como uno de los seis jugadores con más partidos en la historia de su selección. Dos bajas notables: el prometedor Domantas Sabonis (frenado por su nuevo equipo NBA, Indiana Pacers) y el siempre eficiente Paulius Jankunas. Un clásico que dará guerra.