El lunes, día de descanso, estuvimos ejerciendo un poco de turistas dando un paseo por el Nilo, uno de los ríos con más historia. Tal y como decía un entrenador amigo, hacer EQUIPO también es entrenar. Y además lo hicimos con la alegría y satisfacción de haber cumplido el primer objetivo: ser primeros de grupo y así tener un mejor cruce en octavos.

Pero no ha sido nada fácil. En la primera jornada, Japón nos lo puso difícil con un baloncesto ordenado y un gran tiro exterior. Con paciencia, finalmente, conseguimos ganar por 11 puntos. Siempre el primer partido es muy complicado por los nervios, ya sabéis,mariposas en el estómago. Por eso, empezar con victoria fue importante para la confianza. Al día siguiente contra Canadá, una de las favoritas del torneo, y gracias a un gran esfuerzo defensivo colectivo, pudimos paliar la diferencia física y certificar la primera plaza. Mucho carácter el de estos jugadores, como os dije, generación con gen competitivo.

Este martes nos queda Mali para cerrar la fase de grupos, partido que nos tiene que servir para seguir construyendo y prepararnos para los partidos del todo o nada. Se trata de un rival muy físico que capturó más de 60 rebotes a Japón y que nos volverá a poner a prueba.

Por los resultados que se han dado, nuestro rival en octavos será el que pierda del partido Iran contra Angola. Eso será ya el miércoles, nuestro primer partido sin red y que clasifica para estar entre los 8 mejores del mundo. Confianza máxima en estos jugadores y staff técnico que el día D y hora H estarán preparados para dar el máximo. #SomosEquipo, vamos con todo