Los seis jóvenes a seguir en el básquet de Sudamérica

El baloncesto en Sudamérica ha sido dominado por Brasil y Argentina. Últimamente Venezuela ha dado un paso hacia adelante, pero sigue un poco distante de esas potencias, si tomamos en cuenta la exportación de jugadores hacia las principales ligas del mundo.

En el continente, hay jugadores jóvenes, de menos de 24 años de edad, que han brillado en cada una de sus ligas y que son las grandes promesas del baloncesto de estos tres países.

A ponerle el ojo a los siguientes jugadores:

-Lucio Redivo (ARG) 23 años

Es la gran joya de Bahía Basket. El escolta tiene una gran capacidad para anotar y un estilo de juego explosivo, tanto para involucrar a sus compañeros en ataque como para finalizar. Viene de convertirse en el máximo anotador de la Liga de las Américas (su equipo perdió la final ante Guaros de Venezuela) con un promedio de 22.1 puntos en casi 34 minutos por encuentro. Ha despertado interés en España, en equipos como el Fuenlabrada y Estudiantes de Madrid. Seguramente la ACB será su próximo destino.

-Nicolás Brussino (ARG) 24 años de edad

El salto de Brussino fue enorme. De jugar la Liga Nacional de su país, se fue directamente a firmar por tres años con los Dallas Mavericks, equipo en el que debutó este año en la NBA. No utilizó el recurso de algunos de sus compatriotas, como Manú Ginóbili y Luis Scola, que hicieron escala primero en Europa para luego convertirse en jugadores de la mejor liga del mundo. Brussino es un alero atlético, que debutó apenas a los 19 años en su país y ya tiene en su haber una participación en Juegos Olímpicos (2016). En Peñarol, antes de pactar con Dallas, promedió 14.6 puntos, 5.5 rebotes y 3.1 asistencias. En su primer año NBA, dejó 2.8 puntos en 54 juegos. Se espera mucho de él.

Bruno Caboclo (BRA) 21 años de edad

Caboclo es un alero nacido en Sao Paulo con las características habituales de un jugador brasileño: Brazos bastante largos, destacada capacidad atlética y una altura más que aceptable para su posición (2.03 m). Su juego fue desarrollado en Estados Unidos, a nivel colegial, antes de regresar a su país en 2014, cuando jugó con el Pinheiros, con un promedio discreto de 4.9 puntos y 3.9 rebotes en 16 encuentros. Actualmente pertenece a los Raptors de Toronto y participó en la última edición de la NBA D-League, en la que dejó 9.9 tantos y 5.4 rebotes en 34 encuentros. Aunque su juego aún está en desarrollo, seguramente en los próximos años será figura en la selección de su país.

Raúl Neto (BRA) 24 años de edad

El desarrollo de Neto ha sido rápido y se ha ganado el puesto de ser otro brasileño en la NBA, con el Utah Jazz. De hecho actualmente está participando en la postemporada con su equipo. En su debut en la D-League, llamó la atención al rozar el triple doble: 14 puntos, 12 rebotes y 9 asistencias. Actuaciones como esta le llevaron a integrar el primer equipo, en el que en esta temporada participó en 40 choques. Antes, había brillado en la ACB de España con el UCAM Murcia. Es, a pesar de su edad, el presente de la conducción de Brasil.

Michael Carrera (VEN) 24 años de edad

Carrera es un polivalente jugador venezolano que puede jugar en las posiciones 3 y 4, a pesar de su estatura 1.98. El nativo de Anzoátegui tuvo un exitoso paso por el baloncesto colegial estadounidense, con Carolina del Sur, donde en cuatro años promedió 9.3 puntos y 6.5 rebotes. Su actuación universitaria llamó la atención del Heat de Miami, equipo con el que disputó la Liga de Verano de la NBA, aunque sin mucho éxito. Luego de un breve paso por el BC Avtodor de Saratov, de la liga VTB de Rusia, el alero continúa su carrera en su país, con Marinos de Anzoátegui. Aún no ha debutado con la Vinotinto y lo podría hacer en la Americup 2017, que se jugará el próximo agosto.

Anthony Pérez (VEN) 23 años de edad

Anthony Pérez no ha cumplido con todo lo que se llegó a especular con su talento. Alero de 2,06 metros de estatura, con buen manejo de balón y tiro perimetral, el jugador sucrense llegó a ser comparado por la cadena ESPN, en sus años de baloncesto colegial, con Dirk Nowitzki. Sin embargo, no pudo explotar en la NCAA, en la que tuvo actuaciones discretas con los Rebels de Mississippi. En 2016 jugó con la selección de Venezuela en los Juegos Olímpicos y actualmente es parte del plantel de Trotamundos de Carabobo en la LPB. Aunque aún no ha evolucionado como se espera, el baloncesto venezolano tiene grandes expectativas con Pérez.