BASKONIA 88-CSKA MOSCÚ 90 (0-3)
Un orgulloso Baskonia dice adiós a la Euroliga con polémica
El equipo vitoriano tuvo balón para ganar o llevar el partido a la prórroga, pero Hines taponó el tiro de Hanga. El CSKA se clasifica para la Final Four de Estambul.
El CSKA tenía un vuelo el miércoles a las 14:25 rumbo a Moscú y al final lo cogerá. Los de Itoudis resolvieron la serie con un contundente 3-0. Es cierto que el Baskonia dio la cara en todos los choques y que tiene que hacer un gran balance de su temporada europea. Larkin despertó en los últimos instantes pero, en el fondo, llegó un poco tarde. Blazic forzó una pérdida entre De Colo y Teodosic a falta de 6 segundos con 88-90 pero el triple final del de Ohio no entró (hubo falta de Kurbanov que le habría llevado al tiro libre tres veces). La gente se marchó del Buesa con cierta sensación de atraco. Hines sí taponó claramente a Hanga luego.
El Baskonia comenzó el partido con más energía aunque se estrellaba con el físico de los rusos (9-7, min. 4). Larkin sumó muy pronto su segunda falta personal y Sito Alonso se las tuvo que apañar con Laprovittola como segunda opción y Rafa Luz de tercera. El CSKA fue muchas más ocasiones que su rival al tiro libre (elemento de debate todos estos días) pero los baskonistas dominaron el rebote (incluso el ofensivo). De Colo era muy poco protagonista y Teodosic no entró en la cancha hasta el minuto 7 (con la barba afeitada, no como en Moscú). Beaubois también sumó su segunda personal por lo que secundarios como Budinger tuvieron que coger el protagonismo (9 puntos en apenas 6 minutos).
El segundo cuarto fue el de las tanganas. El primero por un enganchón entre Blazic y Higgins con Teodosic mediando en serbo-croata. Tuvo la mala suerte de que el que estaba en medio del lío también habla esa lengua: Belosevic sacó doble técnica al base del CSKA y al escolta del Baskonia. Parece que eso espoleó a Cory Higgins, que hizo una segunda entrega espectacular con canastas imposibles. De hecho un mate estratosférico provocó la desconcentración de los vitorianos y supuso un punto de inflexión negativo para los locales.
La segunda liada fue entre Aaron Jackson y uno de los árbitros (al que empujó levemente). Nueva técnica para el americano. Baskonia pasó de dominar el cuarto (29-22) a sufrir (30-34) pero un buen estirón final con triple de Hanga aprovechando la zona de ajustes rusa permitió a los locales marcharse por delante en el marcador. Para entonces ya era evidente que el equipo vitoriano estaba cometiendo demasiadas pérdidas, una constante en esta serie tanto en Rusia como en la capital vasca.
Las cosas fueron a tirones en el tercer cuarto. Hasta el 25 las fuerzas fueron igualadas pero Teodosic (que cojeaba por problemas en su pierna izquierda) y De Colo empezaron a destapar el tarro de las esencias y estiraron la goma (63-68). Un descomunal Shengelia, con 17 puntos en ese periodo, equilibró el marcador y dejó todo pendiente para la última entrega. A esas alturas, ni Larkin ni Beaubois habían entrado en el partido de verdad. Era claramente un partido para los secundarios. De hecho no lo hicieron en ningún momento y el choque se puso muy cuesta arriba tras un triple de Jackson (72-79, min. 35).
Los de Sito Alonso sólo anotaron 4 puntos en los primeros 7 minutos y medio de ese último cuarto. El CSKA llegó a ir ganando por 10 puntos y apuntaló su triunfo porque cometió menos errores que su rival en los momentos claves. Los árbitros tampoco ayudaron especialmente a los alaveses castigando con faltas algunos contactos muy leves o pitando un pie increíble a Hanga (el balón le dio en el muslo). El talento ruso acabó por imponerse pero los colegiados les ayudaron, especialmente en la última jugada.