Los Golden State Warriors sufrieron su primera derrota este sábado. Fue en Milwaukee, ante unos Bucks que se aprovecharon de la desconexión física y mental de los de La Bahía tras su sufrido partido en Boston. Fue la primera tras 28 partidos y, para que mentir, fue una sorpresa para todos. Los jugadores que entrena ahora Walton han ganado a Clippers, Bulls, Rockets, Grizzlies... y un largo etcétera de grandes equipos que por plantilla son mucho mejor que los pupilos de Jason Kidd.

La sorpresa, además, dejó un sabor agridulce a todos. Pues, llegados hasta aquí, todos imaginaban un duelo épico el día de Navidad entre Warriors y Cavaliers, los dos últimos finalistas de la NBA, en el que los campeones podrían haber batido el récord de 33 triunfos seguidos de Los Angeles Lakers. Pero ya no podrá ser. 

Uno de los más molestos por este asunto es J.R. Smith. "Me enfadé, no voy a mentir. Cuando les tocó un partido difícil en Boston, estaba viendo el partido en mi casa y yo estaba como ‘Hombre, tenéis que sacar esto adelante. Tenéis que empujar para lograrlo. Quería que siguieran invictos…hasta que les tocara jugar contra nosotros”, subrayó el escolta de los Cavaliers a la ESPN.