Harrison Barnes fue una de las piezas capitales para que los Golden State Warriors conquistasen el anillo la pasada temporada. Con 2,03 metros, el alero tuvo una gran importancia en los retoques defensivos de Steve Kerr durante los playoffs (Zach Randolph aún lo recuerda). Y aunque en anotación está lejos de los grandes warriors como Stephen Curry y Klay Thompson (lleva 9,8 puntos de media en sus primeras cuatro temporadas), su porcentaje es similar al de estos dos y superior al de Draymond Green, el otro gigante de La Bahía. Llega al 44% en tiros de campo y supera el 45% en tiros de dos (47,2%). Es decir, Barnes demuestra, cada año, que es un jugador capacitado para la mejor liga de baloncesto del mundo con un límite de crecimiento desconocido.

La imagen del Halcón Negro, de todas formas, no se queda sólo en el parqué. Barnes es un apasionado de las redes sociales. Su nombre se encuentra en Facebook, Twitter e Instagram, y en la primera de ellas pasó parte de su verano de 2014 colaborando como externo. Una actividad que realizó entre sus visitas a la Copa del Mundo de Brasil y su papel durante los entrenamientos de la selección de Estados Unidos, previos al Mundial de España. 

Su papel como becario en la empresa de Mark Zuckerberg fue doble. Por un lado, daba a sus compañeros su visión de cómo se relacionaban los jugadores con las redes sociales (Derek Jeter y Landon Donovan anunciaron su adiós a través de Facebook). Y por el otro, su colaboración (no cobró, ni ocupó el puesto de otro trabajador) le proporcionó una mejor visión de cómo es la plataforma y la manera de hacerla más eficiente para relacionarse con sus seguidores.

"Estar en la NBA y ser capaz de conectar con los fans, a través de las redes sociales, es muy grande. Pero luego vienes aquí y conectas con la gente que hace estas herramientas, las aprendas a utilizar de manera más eficaz y es aún mejor", expresó Barnes que ya piensa, con solo 23 años en su futuro lejos de una NBA que ya le ha dado un anillo de campeón: "Llegará un momento en que la pelota se pare y tendré que pasar a otra cosa, sea la que sea. Pero sólo sé que me ha gustado estar involucrado con la tecnología y las redes sociales estos últimos años".