El Unicaja se pasea y se jugará el liderato ante el CSKA en casa

El Unicaja ganó sin despeinarse al Dinamo Sassari (65-77) y se jugará ser primero de grupo el próximo viernes 18 contra el poderoso CSKA. Los de Joan Plaza no tuvieron dificultades para superar al campeón de Italia, desacertado, desmotivado y en plena crisis.

El Dinamo Sassari comenzó empujando con un Alexander inspirado (17-11 minuto 5). Ahí se le evaporó el gas. El Unicaja se puso a defender. La fuerza bajo aros de Hendrix más el acierto exterior de Jamar Smith y Kuzminskas cerraron el primer cuarto con 23-26 tras un parcial de 6-15. Los segundos diez minutos mantuvieron los cauces de control de los malagueños con estreno oficial de Jack Cooley, el reciente fichaje que llegó en lugar de Germán Gabriel. La distancia se agrandó hasta el 39-48 con el que se llegó al descanso. Hendrix, descomunal, ya sumaba 14 puntos.

El Unicaja arranca el tercer acto con 39-55. Parcial de 0-7. Los sardos se ahogan con la tremenda presión defensiva de los de Joan Plaza y con otro triple de Kusmiskas se rompió el partido. En el minuto 25 y el electrónico ya marcaba 41-58. Marco Cavani, el entrenador que entró por el despedido Romeo Sachetti, pidió tiempo muerto para detener la hemorragia, pero la diferencia creció hasta los 18 puntos (43-61 minuto 27) llegándose final del tercer cuarto con 51-63 y porque los italianos maquillaron distancias con un 8-2 por la relajación de los verdes.

Varnado apareció y Sassarri se puso 53-63. Alberto Díaz y Jamar Smith respondieron cuando más se les necesita con cinco puntos seguidos (53-68). El Unicaja no estaba para bromas (55-72 minuto 34) y administró con autoridad su ventaja, a pesar del arreón del Sassari gracias a un triple del intermitente Haynes (60-72 a falta de 3,50 minutos para el final). Los verdes ni pestañearon. Enorme partido de Jamar Smith que terminó con 20 puntos y segundos para el joven rumano de 2,14 Cristian Uta. El Unicaja suma, sigue y da síntomas de crecimiento.