Campazzo y Lima suman 56 de valoración para el Murcia

El UCAM Murcia logró su primer triunfo de la temporada ante un Baloncesto Sevilla que sigue sin reaccionar y fue incapaz de aprovechar sus ventajas en San Pablo. El talento de Campazzo, clave en los instantes finales, fue decisivo para tumbar a los de Casimiro, que sólo se sostenían merced a los triples de Nachbar y la valentía de Balvin.

Nachbar reinó en un primer cuarto convertido en un festival de triples. De los 23 puntos de los locales, 21 fueron canastas de tres. Nachbar ejecutó cuatro lanzamientos perfectos que mantuvieron al Baloncesto Sevilla en la película pese a que su juego se asemejaba ya al de citas anteriores. Escasez de recursos solucionada con acierto individual. Pero el Murcia no rechazó el intercambio de golpes. Campazzo y Kelati aceptaron el reto para que el equipo de Katsikaris siguiera la estela de los sevillanos. Lima rompía por dentro a los locales, que tuvieron en Anderson a un líder carente de soluciones efectivas: su rendimiento sigue infinitamente alejado de lo que necesita su equipo.

Al ritmo de Miljenovic trató el Baloncesto Sevilla de tomar ventaja en el segundo cuarto. El joven base escondió el balón e inventó pases imposibles para que Balvin y Oriola entrarán en acción. El festival de triples se transformó en una batalla de carreras. Campazzo mantuvo a los suyos en escena y Berni puso pausa antes de un descanso que colocó a los sevillanos con una renta de siete puntos pese a que Anderson seguía encendiendo alarmas con pérdidas de ingenuo (48-41).

Pero Las imprecisiones reinaron en un tercer cuarto que recuperó la igualdad inicial. El UCAM se agarró al talento de Campazzo y, sobre todo, a la aparición estelar de Antelo. Su tercer cuarto mantuvo con vida a los visitantes, que dañaron cada entrada interior de los de Casimiro, sólo capaces de ejecutar acciones de brillo cuando Bamforth levantaba la mano. Balvin seguía cerrando espacios y Nachbar anotando, pero no era suficiente para frenar a un Lima enchufado.

Un punto abajo al inicio del último cuarto, el Murcia entregó el mando a Campazzo cuando el Baloncesto Sevilla parecía tenerlo en su mano. Pero los locales temblaron y los de Katsikaris enfriaron San Pablo. Campazzo levantó la mirada, amagó y anotó un triple que convirtió la cita en un intercambio de atrevimientos. Y ahí sonrió el Murcia. Aprovechó la debilidad de los locales y apretó el puño con el argentino como líder en un tramo final de nervios. Bajo la igualdad, el Murcia tuvo un base. En el Baloncesto Sevilla, aún se le espera.