Pau Gasol (sobresaliente): Poco más pudo hacer. Terminó con 34 puntos (10 de 16 en tiros de dos), 10 rebotes y 5 asistencias. Dio la cara siempre, como el líder que es, pero resultó insuficiente. Un islote en el ataque de España. Demasiada dependencia de su juego. Sus compañeros parece que deleguen funciones, confiados en que les sacará las castañas del fuego. Aunque a veces también da la impresión de que la calidad de Gasol subyuga al equipo.

Rudy Fernández (suspenso): Dio un arreón en ataque cuando la cosa se puso fea, pero no fue mucho. En defensa, Gentile y Belinelli le superaron. Solo 7 puntos, aunque 6 rebotes y 4 asistencias. Es uno de los referentes y se le pide más. La espalda tampoco le ayuda.

Sergio Rodríguez (suspenso): Arrancó con entradas de mérito, pero luego se diluyó. El perímetro de Italia le desbordó, como al resto de sus compañeros.

Willy Hernangómez (sin calificar): Sumó seis puntos del tirón con buenas continuaciones en apenas cuatro minutos. Sin embargo, cuando regresó luego a la pista cometió errores defensivos. Jugó 5:09.

Pau Ribas (suspenso): Metió dos triples en el inicio y dejó de sumar. Suspende arrastrado por el colectivo, que para eso es un deporte de equipo.

Felipe Reyes (suspenso): Brillante de salida (9 tantos en 7 minutos), no ayudó en una segunda parte que lo decidió todo.

Víctor Claver no jugó.

Fernando San Emeterio (aprobado): No falló un lanzamiento (3 de 3) y en el arranque del último cuarto encadenó 5 puntos. Un intento de avivar una reacción que quedó en nada.

Sergio Llull (aprobado): Tampoco pudo con el perímetro italiano, pero aportó 9 puntos y 9 asistencias. En los 27:47 que estuvo en pista España ganó por dos a Italia. Debe afinar la puntería en el lanzamiento exterior: 1 de 5 en triples.

Pablo Aguilar no jugó.

Nikola Mirotic (suspenso): Vio a Gallinari por el retrovisor pese a sumar 13 puntos y 6 rebotes. España debió buscarle más. Poco trascendente.

Guillem Vives no jugó.