Calathes dirige y las torres griegas destrozan a Macedonia

Un partido entre Macedonia y Grecia siempre lleva ligado el aspecto político, las rencillas nacionalistas tan comunes en esa región del mundo, por lo que la victoria, es más que una victoria. Y en el debut de ambas selecciones en este Eurobasket, fueron los helenos los que alzaron la bandera de la patria sobre su rival (65-85) con un triunfo que se cimentó en dos claves: la dirección sublime de Calathes (8 asistencias) y el poder en la zona de sus tres torres. Bourousis (16 puntos y 10 rebotes), Printezis (18) y Koufos (11 y 11) fueron colosos ante la incapacidad de Gjuroski, Hendriks y Samardziski para tapar la fuga en la pintura.

Demasiado poder ante una Macedonia que solo encontró su sitio en el partido al inicio del mismo. Comenzaron asustando al equipo de Fotis Katsikaris con un 7-1 de entrada que mostró la frialdad griega al saltar a la cancha. Pero ahí se acabó todo para ellos. Un parcial 2-18 daba la vuelta al partido (11-19) y dejaba a los balcánicos sin capacidad de reacción. No encontraron comodidad en su juego salvo desde el perímetro.

La selección dirigida por Marijan Srbinovski dio muestras de hacia dónde se dirige el baloncesto actual. Poco hueco interior y mucha importancia de los francotiradores. Nada de tiros a media distancia. Todo debe ser de largo recorrido. Llegaron a los 12 en 30 intentos. Los dos Stojanovskis, Ilievski, Kostoski (4), Simonovski y Trajkovski contribuyeron a la nueva cultura.

Macedonia logró dos canastas más desde el triple que de dos y tres más que desde la personal. Casi nada. A través del perímetro, lograban mantener sus ilusiones. Pero nada más. Del 36-40 de principios del tercer cuarto al infranqueable 50-59. Grecia no iba a dejar escapar su momento. Tiene las armas y la habilidad necesaria para dejar sin respiración a cualquiera. Y sabe como usarlas.