La Selección ya ha hecho los deberes en esta primera fase y no ha necesitado repaso de última hora. A falta de la última jornada —ante Suecia— las de Mondelo ya tienen asegurado el primer puesto del grupo y pasarán a la segunda fase con dos triunfos. Pero España sigue sin estar fina los 40 minutos: baloncesto a rachas. Eso le ocurrió también ante Hungría (46-69). La Selección comenzó muy acertada; lo metía casi todo. El 4-13 en el marcador era producto de un 5 de 6 en tiros de campo. Sólo un fallo, desde el triple, de Alba Torrens que por ese entonces ya llevaba 7 puntos. La máquina estaba bien engrasada; o al menos eso parecía. Las pívots titulares españolas volvieron a estar con problemas de faltas y todo antes de que saltara a pista el techo de este campeonato. Pero Mondelo tenía su as en la manga. Con Hadar en pista (2,08) le pasó el testigo en la pintura a Luci Pascua, el techo de la Selección, casi sin minutos en este Eurobasket pero la única que podía frenar a la gigante húngara, que anotó una canasta sobre la bocina que enfadó a Mondelo: 26-34 al descanso.

De los 21 puntos del primer cuarto se pasó a los 13 del segundo y los 10 del tercero. Corregimos: la máquina seguía sin funcionar a la perfección. España no está fina desde más allá de 6,75. En los dos primeros partidos firmó un pobre 9 de 34 (26,5%). Malos porcentajes que le dan la clave a los rivales: cortar con falta cualquier intento de contraataque de la Selección y defender en zona, permitiendo tiros lejanos. Así, y con la ayuda de una antideportiva a Ndour y una técnica, Hungría se metió de nuevo en el partido: 41-44 con diez minutos para jugar.

Pero en el último cuarto, Mondelo ajustó la tuerca que se había soltado. Ndour y Alba comenzaron un trabajo que redondeó Leticia Romero. La benjamina del grupo (20 años) saltó a la pista como es ella, sin complejos. Con siete puntos en ese cuarto aumentó la renta a +22 (46-68). Un dato: estuvo en la cancha sólo 13:44, pero en ese tiempo España firmó un +21. “Vamos a divertirnos”, les pedía Mondelo a las jugadoras en un tiempo muerto. Y ellas obedecieron. Apabullaron a su rival en el rebote (47 por 24, con 14 de Alba Torrens) y mejoraron algo en el triple (4 de 13, un 38,5%). Por si alguien piensa que a esta Selección se le puede frenar con una zona.