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CONFLICTO CSD-ABP

Los jugadores están contra la normativa de los pasaportes

La ABP cree, además, que la nueva normativa llega tarde, porque el mercadeo de pasaportes es ya algo habitual. También considera que es insuficiente.

REUNIDOS. Alfonso Reyes (ABP) y Miguel Cardenal en una reunión.

La Asociación de Baloncestistas Profesionales (ABP) hace suya la declaración (texto inferior) de Antonio García Plata, presidente de la de Deportistas. El CSD publicó en el BOE el 8 de mayo una resolución que recoge una serie de criterios —vinculación deportiva, familiar o personal con el país— para evitar los pasaportes exprés, aunque el sindicato no está conforme. Esta temporada se han disparado los jugadores inscritos con nacionalidad cotonú con la que, gracias a un acuerdo firmado en 2000 entre la Unión Europea y 78 países de África, el Caribe y el Pacífico, ocupan plaza de comunitarios. Según el sindicato, la resolución sería una fórmula para compensar a la Asociación después de que el CSD redujera el año pasado de cinco a cuatro el número de cupos o jugadores de formación en las plantillas de doce.

La ABP cree, además, que la nueva normativa llega tarde, porque el mercadeo de pasaportes es ya algo habitual. También considera que es insuficiente, porque no se ha extendido a otros deportes donde la práctica no es tan frecuente como en el baloncesto, pero podría llegar a serlo.

Por último, la nueva normativa iría en contra de las leyes vigentes en la Unión Europea. Si a un jugador, que no cumple con las exigencias mínimas para poder validar su pasaporte en España, no le tramitaran la ficha, éste podría acudir al Tribunal Europeo.

García Plata: "Es otro decretazo"

Parece que Miguel Cardenal, nuestro Secretario de Estado para el Deporte ha tomado carrerilla y se está pasando todos los semáforos en rojo. Ahora nos deleita con otra resolución que llega tarde y mal. Tarde porque el asunto de los “pasaportes exprés” hace ya mucho tiempo que colea y se debió intervenir mucho antes. Y mal porque, en un mero acto interpretativo de un Convenio del baloncesto profesional, el secretario de Estado se permite añadir condiciones a un Tratado Internacional firmado por la Unión Europea y porque, además, constituye un acto de injerencia en la soberanía del Estado que ha otorgado el pasaporte­. Cabe añadir, a mayor abundamiento, que este nuevo decretazo no resuelve la cuestión en las restantes modalidades deportivas y, como lamentablemente ya es costumbre, se ha hecho a espaldas de los deportistas pese a que, la Junta Directiva de la Asociación de Deportistas, que yo presido, se interesó por el asunto en su calidad de representante de más de 8.000 deportistas. ¿Había que intervenir? Pues claro que sí, pero a través de la Unión Europea. Lo dicho: tarde­ y mal.