REAL MADRID 99- ZALGIRIS 83
El Madrid no falla y se medirá al Efes en el playoff de cuartos
Los blancos se sobrepusieron a un parcial del Zalgiris de 18-36 con una gran segunda parte. Rivers, Reyes y Sergio sobresalieron. Buen partido de Campazzo.
El Barça no falló y el Madrid tampoco. Se quedan como estaban. Un alivio para los blancos, que esquivan al Olympiacos en el playoff de cuartos. Y de paso al CSKA, el mejor equipo de la Euroliga hasta ahora y con el que solo podrán encontrarse ya en la final. A cambio, el rival en el cruce será el Anadolu Efes turco de Ivkovic. Y de Krstic, Saric y Draper.
Un desahogo, decimos, pero no por el reparto de adversarios, sino por los titulares de prensa que evitaron, que hubieran sido algo así pero escrito en griego: “El Madrid vuelve a elegir rival, otra vez el Olympiacos”. La casualidad lo hacía posible, la de cerrar de nuevo esta fase con el mismo enemigo que en 2014, el Zalgiris, y con el mismo oponente esperándole en caso de derrota, el Olympiacos. Pero esta vez no hubo traspié, aunque sí incertidumbre, y la victoria borró los titulares ofensivos, esos que tanto molestaron a la plantilla y a Laso hace un año.
Luego, ya sí, felicidad por la primera plaza. Líder del Top-16 por segunda vez en las 14 ediciones de vida del formato. Y líder por encima del Barça, que apilaba seis temporadas consecutivas arriba en la tabla. Desde 2009 hasta este viernes. El castigo azulgrana será medirse al correoso Olympiacos, que tiene a Spanoulis entre algodones. La gran ventaja, la misma que la del Real: el factor cancha a favor. Dos encuentros en casa para abrir los cuartos (los blancos jugarán este miércoles 15 y el viernes 17), dos fuera la siguiente semana y un hipotético quinto con el respaldo de la grada el 28 de abril.
Para llegar hasta aquí el Madrid ha tenido que ganar 19 de 24 partidos en los últimos seis meses. Y ha tenido que tumbar esta temporada al Zalgiris no dos veces, sino cuatro (9-1 en los tres últimos cursos). Venció por 16 tantos (99-83) previo golpe en el pecho para reaccionar a un segundo cuarto nefasto que amenazaba con hundirle las cuentas. Desde el minuto 8 hasta justo antes del descanso encajó un parcial de 18-36 con Bourousis señalado y tocado (pierna derecha). Rivers, en una de sus mejores actuaciones, lo resumió con cinco letras: “Relax”.
El Zalgiris, con Gudaitis y Vene destilando talento, se paseaba por la cancha como Pedro el lituano por su casa. Arreón de inicio y sueñecito después, la historia local. Ya lo habíamos visto antes, por cierto. Igual que los problemas para cerrar el rebote. De nuevo, batalla perdida (25 a 31, 10 ofensivos de los de Kaunas). Y de nuevo el Madrid de los terceros cuartos al rescate, el de la versión arrolladora con un quinteto energético: Campazzo, Llull, Rivers, Reyes y Ayón. Muy bien el mexicano, fabuloso el capitán y claves los bases y el alero estadounidense.
Los seis puntos en contra (37-43) quedaron en nada con nueve de un Reyes martillo en mano golpeando sobre el yunque. Campazzo anulaba a Cherry, lo desesperaba y se gustaba. Y Rivers lo daba todo, defensa y acierto. Se le fichó como chico para todo y para dar un paso al frente en ataque en días señalados, en ausencia de Rudy, por ejemplo, que como era lógico no jugó (12 puntos y 9 rebotes, 21 de valoración). Luego entró Sergio Rodríguez y arrasó. Fino en el triple y en el pase. Carroll se unió a la fiesta (59-40 en la segunda parte). Apenas un aperitivo de lo que se avecina. Clásico este domingo y doble duelo ante el Efes, todo de corrido en seis días. Y todo en el Palacio.