España se gusta ante Brasil y se jugará los cuartos ante Chequia

La Selección resolvió su partido de Brasil en un segundo cuarto brillante y se jugará este martes con Chequia el billete directo a los cuartos  y el poder decir “bye bye” a las estadounidenses hasta una hipotética final. Las de Mondelo, se contagiaron de su rival para desplegar el verdadero jogo bonito de este campeonato. Si una cosa ha conseguido el Rey Midas del basket femenino con este equipo es que cada pieza encaje y sea fundamental para completar el puzzle, aunque ayer el inicio no fuera tan idílico. Da Souza cometió la tercera en menos de seis minutos, pero sin ella en pista, Brasil aguantó gracias a una defensa zonal que se le atragantó a las españolas. Los lanzamientos no entraban (5 de 15 en tiros de campo y un pésimo 2 de 8 en libres) y España estaba atascada. Ese tiqui-taca del que hablaba Mondelo no aparecía por ningún lado y la Selección cerró el primer cuarto por detrás (12-13). 

Pero ese estilo tan característico, que le valió un oro en Francia el verano pasado y le convierte en ese rival al que nadie quiere enfrentarse, se asomó por el Ankara Arena en el segundo cuarto. La Selección apretó detrás y corrió. ¡Y cómo corrió! Con Silvia Domínguez y Anna Cruz juega a más revoluciones y los contraataques fulminaron a Brasil, que poco pudo hacer para frenar las embestidas españolas. Además, España dominaba el rebote (41 por 28) y Sancho Lyttle, que tuvo un papel más secundario, terminó liderando a  su equipo en puntos (15), rebotes (13), asistencias (5) y valoración (27). Y todo con Torrens muy efectiva en el triple (3 de 3 y +30 con ella en pista). España dio el segundo aviso en este Mundial y se asegura el cruce de octavos. Si el martes gana a Chequia (15:15) se clasificará, como primera de grupo, directamente para cuartos.