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MUNDIAL 2014

Ibaka: "Podemos ganar a EEUU, en Londres ya faltó poco"

Para una mayoría de opinión, Ibaka lleva en sus muelles el plus de intimidación y amenaza interior que puede dar el título mundial a España.

Ibaka es optimista respecto al Mundial.
Ibaka es optimista respecto al Mundial.JAVIER GANDULDIARIO AS

Empecemos por el principio: allí en Brazzaville, República del Congo, hasta que fue a su primer equipo, el Avenir, Serge Ibaka, uno de 18 hermanos, jugaba en pistas de cemento, con amigos, familia y... ¿a las órdenes de su abuela?

De esto ya se hablado muchas veces... ufff, nos haría falta mucho tiempo. A mi padre, Desiré Ibaka, le gustaba mucho el baloncesto. Él quería que yo jugara. Pero sí: mi abuela materna era la que motivaba porque mi madre, su hija, había sido jugadora. Mi abuela seguía el baloncesto porque seguía a su hija. Y ahí empezó todo...

Esa potencia de salto, esos muelles... ¿de dónde le vienen?

Es algo genético. Y además de genética, trabajo duro.

Suele liderar la NBA en tapones. ¿Cree que alguien salta más que usted en esta Liga? ¿Sí o no?

Sí, sí... hay gente que salta muchísimo: Blake (Griffin)... y Kevin (Durant), que también salta mucho. Hay muchos.

Muchas veces, en los duelos Clippers-Thunder, Ibaka y Griffin se las tienen tiesas.

Ja, ja, ja, no pasa nada. Es algo normal. Es baloncesto.

¿Qué le ha pasado a su colega Durant para renunciar de golpe a la selección de EE UU? Usted puede saberlo.

No lo sé. No quiero saber. Es su vida. Tenía ganas de jugar, bromeábamos de que nos íbamos a ver en esta final de ahora. En fin, ya no podrá ser.

¿Considera que España puede ganar la final de esta Copa del Mundo? ¿Cree que pudieron haber ganado a EE UU en los Juegos de Londres?

En Londres casi ganamos, es cierto. Nos faltó un poco. Podemos hacer algo si llegamos a la final. Tenemos un equipazo. Pero falta un poco. De momento, tenemos a Francia.

Usted, Serge, causó sensación en 2011, en la final del Eurobasket de Lituania, con sus cinco tapones a los franceses. ¿Hay rivalidad?

Lo de aquellos cinco tapones ya es pasado. Pero sí hay rivalidad, claro. Somos dos de las naciones más importantes del mundo. Nos conocemos bien. Este partido es más importante que el de Granada, la semana pasada. Y será distinto. Habrá que jugar muy duro para ganar. Lo demás da igual.

Hay debate sobre la rotación española, especialmente en lo que concierne a los pívots. ¿Está feliz, Serge, con los minutos de que disfruta?

Mmmm... es una situación difícil para los jugadores y para el entrenador: porque todo el mundo quiere jugar y jugar duro, a tope. Eso es algo muy bueno. Nadie está aquí para ir de vacaciones. Pero en un equipo donde todos son estrellas y los doce jugadores pueden ser titulares, es duro hacer ese reparto de minutos. Situación difícil.

¿Qué nos puede decir sobre Pau y Marc Gasol?

Son dos grandes jugadores y dos grandes pívots, de los mejores. Jugando con ellos aprendes mucho. Les tengo mucho respeto: porque aparte de ser buenos, son buena gente.

No ha querido ‘mojarse’ mucho sobre una eventual final entre España y EE UU. Pero sí podrá decir algo sobre lo que ve mejor y peor en la selección estadounidense...

Lo mejor: son un buen equipo, con jóvenes de talento que ya han sido all stars y que van a ser aún mejores, serán las estrellas del futuro. En bases y escoltas tienen a Harden, Curry, Rose y Kyrie Irving que están entre los diez mejores de la NBA. En pívots, Cousins y Davis deben de estar entre los cinco mejores. ¿Lo peor? No veo nada peor. Si les ganamos será porque hayamos jugado muy bien y a un nivel muy alto, no por sus defectos. No hay otra manera.

¿Cómo ve a su equipo en la NBA, estos Thunder de Okla­homa City?

Hemos ido a mejor cada año. Veo que estamos entre los tres o cuatro mejores de la Liga. Estamos ‘casi allí’. Nos falta sólo un poquito más. Y vamos a mejorar para conseguirlo.

Y usted en concreto, Serge Jonas Ibaka Ngobila, aquel chico que vino de Brazzaville...

Aún no he conseguido todo lo que quiero. Pero estoy en el camino para ello. Y lo voy a conseguir: seguro que lo haré.