El Bilbao Basket se impuso al Pau Elans Bearnais (heredero del histórico Pau Orthez) en Francia en un partido que ha dominado en tres cuartas partes que se ajustó en el último acto. Samb (impecable en la línea fatídica e intenso como siempre) fue el protagonista definitivo: anotó dos tiros libres que cerraron el debate, aunque antes el Pau tuvo una posesión para ganar o ir a la prórroga. Nivins se encontró con la presencia de Mamadou, falló y luego le hizo falta. El Bilbao Basket va integrando sus nuevos jugadores, y los que han llegado del Eurobasket. El norteamericano Carmichael jugó su primer partido con los ‘Hombres de Negro’ y Bertans (este también de estreno vestino de negro) y Hervelle lo hicieron tras defender a Letonia y Bélgica en la cita de Eslovenia. Fue un compromiso de rachas, lo habitual en pretemporada. Y de cierto juego subterráneo por parte gala en algunos instantes, que arredró a algunos de los visitantes y llevó al cabreo a Grimau (le castigaron con técnica y ahora se lanza un tiro y balón a la banda; y cuando se lanza a canasta y hay rebote ofensivo el reloj vuelve a 14 y no a 24 como antes) por lanzar el balón de mala manera tras entender que no le habían pitado una falta al rival.

El equipo de Rafa Pueyo no pierde nunca la fe. Es más elástico, da mucha rienda a todos los pívots y es polivalente (juega con Grimau de base pero puede poner a todos sus unos a la vez, esto es, Roger, Bertans y Raúl López). Los tiradores tuvieron problemas para ejecutar buenos lanzamientos. Carmichael no pudo mostrar todo su repertorio, estuvo más bien perdido, pero se le ve que aguanta muy bien en el cuerpo a cuerpo y sube muy alto a la hora de taponar e ir al rebote. Bertans está a un nivel de velocidad de cohete y también aporta energía, y tal vez a Vrkic, de los nuevos, es al que se le ve más verde. Kavaliauskas fue el mejor. Pívot muy completo, es capaz de abrirse para tirar, no rehúye el contacto y puede echar el balón al suelo para buscar su jugada.