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España 66 - Macedonia 61

Víctor Claver se asoma en el gran partido de Marc Gasol

Los de Orenga acabaron sufriendo (66-61) en un partido que tenían controlado al descanso. Este miércoles ambas selecciones se volverán a ver las caras en León.

Víctor Claver se asoma en el gran partido de Marc Gasol
EFE

España continúa su rodaje. Lo hizo con retraso (en el calentamiento Macedonia rompió el tablero y el partido empezó media hora después) y con otra victoria, la tercera de la era Orenga, pero que llegó sin muchos alardes, en un partido trabado y con una mala noticia: Rudy Fernández se hizo daño en las cervicales y tuvo que irse al hospital. El seleccionador comienza a dar pistas —España jugará muchos minutos con dos bases— y del partido de Santiago saca algo positivo, el paso al frente de Claver, verdadero héroe en el cuarto final.

Su primera apuesta fue San Emeterio, que salió en el quinteto titular para ayudar a Claver en las ayudas sobre Pero Antic, el nuevo cuatro de los Hawks, y que junto al pequeño McCalebb son la gran amenaza de esta peleona Macedonia. En la primera acción el equipo balcánico ya avisó de cuáles eran sus intenciones (lanzó 28 triples). Con el de Damjan, el más alto de los Stojanovski, alcanzó su única ventaja del partido. Un 0-3 que Marc Gasol —el mejor del partido con 17 puntos y 8 rebotes— se encargó de maquillar con siete puntos seguidos (triple incluido) en los tres primeros minutos.

 A cuatro minutos para el final del primer cuarto, Rudy hacía historia. Saltaba a pista convirtiéndose en el más joven en alcanzar los 150 partidos con la Selección. El alero debutó en la preparación de los Juegos de Atenas en 2004 y nueve años después superó la marca de Epi, el español más internacional (239), que alcanzó esta cifra de encuentros con 28 años y 8 meses, cuatro meses más que el mallorquín.

Pero Rudy se marchó con un golpe y con la segunda guardia, Macedonia cogió aire (23-19,min. 19). La vuelta de Marc y, sobre todo, la irrupción de Mumbrú, que hizo mucho daño con su juego al poste, hicieron volar a España (40-21), antes de que ésta se estrellase. “No podemos apagarnos”, decía Orenga. Pero lo cierto es que la Selección siguió sin encender la luz y Damjan empató el partido a 54 con una remontada que, además, Macedonia labró sin sus dos estrellas. La entrada de Antic hizo que Claver se asomara. El valenciano encestó primero un triple, para después jugarse un uno contra uno que resolvió en un mate del estilo al de Rudy ante Howard en Pekín. Con los cinco puntos del blazer España se rehízo y ganó a una Macedonia que hoy buscará venganza.