Baloncesto | Liga Endesa | Obradoiro 87-Real Madrid 97
La pólvora blanca acaba con un heroico Obradoiro
Llull, Rudy, Carroll y Sergio quiebran la resistencia local
Hace justo tres años el Madrid llegaba a Santiago también con una marca de 11-0, pero tropezó tras una prórroga y al proyecto Messina le salió una grieta que iría a más, que acabó en derrumbe. El de ayer fue un partido de mayor calidad que el de entonces, más atractivo para los aficionados, con un Obradoiro mejor que topó con un rival de recursos infinitos.
Los locales anotaron sin tregua con el triplista Corbacho, el pívot tirador Kendall y el 2,17 Mejri. Al descanso se marcharon con medio centenar de puntos encestados y aun así iban perdiendo (50-52). Enfrente, Carroll sumaba 13 tantos, Hettsheimeir había vuelto a salir de titular para firmar su mejor actuación desde que debutó, Llull mandaba y Rudy retaba a su paisano Corbacho (ambos mallorquines).
Había duelo, pero parte del arsenal blanco seguía bajo tierra. El armamento pesado. El show de Sergio Rodríguez arrancaría en cuarto y medio, Draper ni siquiera había pisado aún el parqué -su intensidad cambió el ritmo coincidiendo con Rudy y Llull en el perímetro- y Mirotic andaba a un paso de olvidarse de las personales cometidas, de soltar una ráfaga de talento. Siete puntos que se añadieron a otros diez de Llull, el mejor en el Fontes do Sar (65-76).
El segundo y definitivo arreón lo lideró el Chacho, Sergio, en modo último Mohicano, salvaje. Tres jugadones (triple, canasta virguera y asistencia para el mate de Slaughter) y a sacarle brillo al liderato. El Madrid sentenció en ataque cuando apretó la tuerca de la defensa. Pero sin agobios, sin estresarse, como hace Sergio. Acumula doce triunfos sin fallo, a tres de los quince que logró en la 87-88,aunque lejos de los registros de la era Ferrándiz. La ventaja con sus perseguidores es ya de tres victorias y el jueves se mide a uno de ellos, el Valencia de los 107 puntos, mientras que el Barça, con cinco derrotas, se desploma con el Clásico del día 30 a la vuelta de la esquina.
Pablo Laso
El primer tiempo fue de gran desgaste, con los dos equipos acertando mucho. En el segundo ajustamos la defensa y sacamos ventaja en ataque".
Moncho Fdez.
El partido tiene un fácil resumen: para ganar al Madrid tenemos que estar muy bien y que ellos no tengan su día y lo segundo no pasó. Nos hicieron pagar cada error".