El nuevo Murcia, peligro para el invicto Madrid
El Real Madrid es un visitante goloso, el líder invicto, al que todos quieren hincar el diente. Hoy defiende su primer puesto en una cancha en la que la última vez que perdió, Sabonis reinaba en España. Los de Quintana, al menos, lo van a intentar.
Mientras el Madrid anunciaba a Hettsheimeir, renovaba a Llull y preparaba el duelo ante el Cantú, a 400 kilómetros distancia, el UCAM Murcia afilaba sus garras para darle hoy una tarascada al líder invicto. Colgarse el cartel de matagigantes es muy goloso. Cuenta sólo como un triunfo, pero da moral e inercia para conseguir muchos más.
El UCAM no ha empezado mal la temporada, con un bloque intenso, joven, en el que sólo Berni Rodríguez (32), un campeón del mundo, es mayor de 29 años. En la segunda jornada tuvo contra las cuerdas al Valencia, aunque le falta un base. En realidad lo tiene: Joe Ragland, pero no puede jugar porque lleva mes y medio esperando un pasaporte Cotonou que no llega, el de Liberia, en concreto. Y hay paciencia porque confían en él, porque creen que es bueno, bonito y barato. Mientras, Josep Franch anda solo ante el peligro, y más tras la baja de Miso. El campeón de Europa Sub-20 tiene talento, pero le falta constancia.
Sabonis.
El Madrid sólo ha caído dos veces en Murcia, la última en marzo de 1995 (90-89), en un día de gloria de tres jugadores que vistieron también de blanco. Michael Anderson (34 puntos), Johnny Rogers (24) y Bobby Martin (21) derrocaron al Zar Sabonis (30, 14 rebotes y 43 de valoración). Una hazaña que en Murcia hace ya 17 años que sueñan con repetir.
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Marcus Lewis, una revelación
Marcus Lewis es un pívot bajito, ni dos metros (pese a los 2,03 oficiales), pero lo suple con kilos, más de 110, agilidad y concentración. En este inicio de campaña es el líder del UCAM Murcia y una de las revelaciones de la Liga Endesa. El tercer jugador más valorado (19,4), séptimo anotador (15,8) y cuarto reboteador (7,2). ¡Y pensar que hace apenas tres años tuvo que pagar para inscribirse en una prueba en Tulsa! Así terminó llegando a la liga filial de la NBA, la NBDL.
