El Gran Canaria intentó con alternativas diferentes en defensa romper el ritmo anotador de su oponente, pero en la primera parte Claver, que acabó con veinte puntos, y en la segunda, Faverani, con catorce, decantaron el partido a favor de los locales.

El Valencia Basket marcó, de inicio, un juego muy físico, tanto en ataque como en defensa, que hizo sufrir al Gran Canaria. Por eso, el técnico Pedro Martínez optó por mover el banquillo y sacar a pista a Palacios y Savané.

En el inicio del segundo cuarto, el Gran Canaria acusó varias pérdidas de balón y despistes en el rebote ofensivo que permitieron que su rival ampliara su ventaja (33-20, m.15).

Apenas vario el encuentro tras el descanso y aunque el equipo grancanario trato de acortar diferencias a base de triples, la distancia en el marcador crecía poco a poco a favor del conjunto local.

El entrenador del Gran Canaria Pedro Martínez apostó por zona 1-3-1 y le salió bien, pues a falta de tres minutos para el final del tercer cuarto el Gran Canaria se acercó a siete puntos (50-43, m.27) tras un robo de balón que Palacios culminó con un mate.

El Valencia Basket, sin embargo, volvió a apretar con la intención de no pasar apuros. Faverani desbloqueó la defensa del Gran Canaria y arrancó el último cuarto con una cómoda ventaja de once puntos.

A partir de ese momento, el Gran Canaria se quedó sin opciones de meterse en el encuentro y se limitó a tratar de que la desventaja no aumentara, mientras que el Valencia Basket no forzó el ritmo, aunque al final ganó con holgura.