El Real Madrid no festejó el título de Copa del Rey en Barcelona porque partió de inmediato a Madrid en un vuelo que aterrizó poco antes de medianoche en el aeropuerto de Barajas, donde les recibieron más de cien aficionados. Desde allí, la expedición se trasladó al restaurante Asador de la Esquina, en el Santiago Bernabéu, donde tuvo lugar la cena de celebración del equipo con directivos y familiares.

Pero los festejos en la capital de España no se llevarán a cabo hoy, al día siguiente de la conquista del torneo como suele ser habitual, sino el miércoles, ya que el presidente del club, Florentino Pérez, tiene que viajar a Moscú para presenciar el partido de octavos de Champions del equipo de fútbol, mañana ante el CSKA.

Protocolo. El Madrid hará un recorrido que le llevará a la Cibeles -lugar de celebración de los éxitos blancos donde ayer ya se dieron cita medio centenar de seguidores-, el Ayuntamiento y la sede de la Comunidad de Madrid, donde su presidenta, Esperanza Aguirre, recibirá a los campeones a las 13:00. Aún no se conoce el orden del itinerario y el resto de las horas, porque el consistorio madrileño no había confirmado ayer cuando tendría lugar su recepción. La celebración no podrá extenderse mucho porque al día siguiente el equipo tiene un importante partido de Euroliga ante el Unicaja en el Palacio.