ACB | MERIDIANO 65-BLANCOS DE RUEDA 72
El Blancos de Rueda se aprovecha del Meridiano
Después de las derrotas de Granada y Menorca, el Meridiano Alicante tenía la oportunidad de dar un paso más hacia su salvación, pero finalmente le pudieron los nervios.
La serenidad del Blancos de Rueda Valladolid en los momentos clave del encuentro le dieron la victoria en su visita a un Meridiano que ha desperdiciado una oportunidad de dar un paso hacia la permanencia, después de conocer las derrotas de Granada y Menorca.
El primer cuarto resultó nulo. Ninguno de los dos equipos consiguió imponerse de forma notoria a su rival y el resultado de empate a dieciséis con el que concluyeron los diez primeros minutos dio una buena muestra de la igualdad que existía sobre la cancha.
Lo más reseñable del primer parcial fueron las dos faltas personales que muy pronto acumuló el pívot estadounidense del Meridiano Justin Doellman y el regreso oficial a la ACB de un ''viejo rockero'' como Iñaki de Miguel, quien esta semana regresó al conjunto alicantino para reforzarlo ante las bajas que arrastra.
En el arranque del segundo cuarto fue cuando el equipo local empezó a abrir una pequeña brecha en el marcador. En gran parte por el desconcierto que, por momentos, suponía al Blancos de Rueda defender a tres jugadores exteriores en el Meridiano cuya posición natural es la de base. Las lesiones han obligado al técnico Txus Vidorreta a reinventar su equipo, aunque no es menos cierto que lo que en ataque podía ser una ventaja, en defensa se convertía en un inconveniente.
El Meridiano consiguió una máxima renta de ocho puntos antes del descanso (31-23, m.17), aunque a la hora de que los equipos se marcharan a vestuarios fue de siete (35-28). Pero el panorama cambió pronto en la reanudación. Elius Báez, que ya había sido el mejor de los vallisoletanos en la primera mitad, comandó la remontada de los visitantes, que en poco más de cinco minutos ya ganaban 39-42. Posteriormente, el partido se convirtió en un intercambio de canastas (48-50, m.30).
Fue en el inicio del último parcial cuando unos inspirados Van Lacke e Isaac López (éste anotó dos triples casi consecutivos) tomaron el relevo de Báez en la anotación de un Blancos de Rueda que se fue de ocho puntos en el marcador (52-60, m.33) y, sobre todo, pareció destrozar anímicamente al Meridiano.
El Meridiano llegó a igualar la contienda (61-61, m.37), pero fue víctima de sus propios errores. El Blancos de Rueda no estaba acertado, pero imprecisiones en el tiro y pérdidas tontas de balón dieron aire a los de Porfi Fisac, que acabaron llevándose la victoria.