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Baloncesto | ACB | UNICAJA 75 - ASSIGNIA MANRESA 51

Unicaja acaba con Manresa en los últimos diez minutos

El Unicaja tuvo que solventar el partido ante el Assignia Manresa en el último cuarto, tras llevar una ventaja clara que desperdició por su irregularidad y de esta manera consiguió un triunfo vital.

El Unicaja tuvo que solventar el partido ante el Assignia Manresa en el último cuarto, tras llevar una ventaja clara que desperdició por su irregularidad y de esta manera consiguió un triunfo vital para intentar disputar la fase por el título, en tanto que deja a los visitantes en estado de preocupación.

El equipo malagueño no podía fallar frente al conjunto manresano. La derrota de la pasada jornada frente al Asefa Estudiantes hacían dudar nuevamente del proyecto cajista, y hasta la conclusión de la Liga regular necesitaba siete victorias más para acceder a la fase por el título, principal objetivo, después de los fiascos en la Copa del Rey y la Euroliga.

El primer cuarto fue muy igualado, con alternativas en el marcador. El Manresa, más concentrado, pudo en algunos momentos con el Unicaja, muy tenso y presionado por la obligación de ganar. Un dato a tener en cuenta fue la nula aportación de su mejor jugador, el pívot inglés Joel Freeland, que no anotó un solo punto.

A Freeland le esperaban sus compañeros y el técnico cajista Chus Mateo, pero el Unicaja tiene jugadores de calidad para suplir un mal día de su compañero, y, a pesar de que el partido era horrible por parte de los dos equipos, los locales, con el mínimo esfuerzo y un par de triples de Uros Tripkovic y Robert Blakney, se pusieron por delante y lograron una ventaja, no excesivamente clara, pero sí suficiente 34-28.

El Assignia Manresa compitió poco tiempo porque el Unicaja apretando en defensa asestó un severo correctivo al dejar sin anotar durante cinco minutos a su rival. Daba sensaciones de equipo endeble, pero una reacción visitante por la indolencia de los andaluces situó el marcador en un preocupante 47-46.

El equipo catalán sólo tuvo que presionar y cambiar la defensa a zona para amargarle la noche al Unicaja, aunque se le acabaron las fuerzas, porque volvió a caer en los mismos errores anteriores, estuvo siete minutos sin anotar 64-48, minuto 37 y un parcial de 17-2 le condenó al abismo y a la derrota.