El Cajasol obra el milagro en el último minuto de partido

El Cajasol logró una milagrosa victoria en el duelo andaluz ante el Unicaja en San Pablo, tras remontar siete puntos de desventaja en el último minuto y llevarse un partido (82-77) que lo mantiene en la lucha para alcanzar los puestos por el título de la ACB.

El comienzo del duelo andaluz se presentaba espectacular con una salida fulgurante del Unicaja lleno de intensidad defensiva y acierto en el aro rival, mientras que el Cajasol se vio intimidado ante el poder en la pintura de Joel Freeland y Robert Archibald (6-14, m.6).

La zona de los sevillanos era superada una y otra vez por los malagueños, que encontraban penetraciones fáciles en ataque y lograban parar el inocuo ataque local para marcharse con ventaja al final del primer parcial (8-19).

El técnico del Cajasol, Joan Plaza, ordenó de inmediato una defensa en toda la pista que incomodó al Unicaja y permitió la remontada sevillana. El escolta estadounidense Louis Bullock y el ala-pívot búlgaro Kaloyan Ivanov se enganchaban al partido para liderar la reacción (16-20, m.16).

Aunque la presión e intensidad del Cajasol llegaba al límite, los malagueños recuperaron sus buenas sensaciones iniciales bajo el mando de Saúl Blanco y Berni Rodríguez, quienes dieron aire a su equipo para mantener su ventaja al descanso (27-31).

Poco cambió el guión tras la reanudación ya que el Unicaja salió de nuevo a la cancha dominando el rebote y anotando con asiduidad para mantener su ventaja (35-40, m.26), aunque el Cajasol seguía con su férrea defensa que le permitió igualar el partido en el tramo final del tercer parcial (43-43, m.28).

Sin embargo, el base búlgaro del Unicaja Roderick Blakney lideró a los malacitanos con dos triples consecutivos que mantenían a raya al Cajasol y consolidaban la ligera ventaja visitante antes de entrar en el cuarto decisivo (45-49).

El cansancio hacía mella poco a poco en la defensa del Cajasol, lo que aprovechó Freeland para apuntalar la ventaja del Unicaja. El pívot inglés, tras una serie de siete puntos consecutivos, culminó un preciso pase al aire de Guille Rubio para confirmar la distancia visitante (52-59, m.33).

El partido agonizaba con el equilibrio de fuerzas entre ambos equipos, aunque el Cajasol hizo el último intento por lograr una remontada que el San Pablo veía lejana debido al gran trabajo del Unicaja y al acierto desde el perímetro de Mcintyre, que casi enterraba las opciones sevillanas (66-73, m.39).

Sin embargo, reaccionó de la nada el Cajasol con un triple de Bullock y otro posterior del base estadounidense Earl Calloway, que regresaba después de tres meses de lesión para realizar el milagro de la remontada (74-73) a falta de pocos segundos.

Mcintyre intentó hasta el final evitar la derrota de Unicaja (78-77), pero la defensa sevillana fue la clave para recuperar una nueva posesión y evitar la igualada malacitana, que se perdió en los tiros libres y dejó en bandeja al Cajasol una victoria trabajada desde la fe y la intensidad (82-77).