Love llega a 29 dobles-dobles seguidos y Griffin frena en 27

El miércoles en el Staples Center de Los Ángeles, combate entre las dos jóvenes sensaciones de lo que va de NBA. En una esquina, Blake Griffin, novato de 2,08 y 21 años de los Clippers, con una racha de 27 dobles-dobles en puntos y rebotes seguidos. En la otra, Kevin Love, de los Minnesota Timberwolves, de 2,06 y 22 primaveras, con 28 dobles-dobles consecutivos. Al final de la noche, la racha de Love subía a 29 (26 puntos y 11 rebotes) mientras que la de Griffin (29 tantos y 8 rechaces) acababa en esos 27, pero la victoria sonreía a los renacidos Clippers (126-111). Han ganado siete de sus últimos diez partidos y con un récord de 16-25 comienzan a soñar con los playoffs tras un horrible inicio de liga.

"Preferiría estar en la piel de Blake ahora mismo, aunque él no ampliara su racha. Ganaron y están jugando un muy buen baloncesto", aseguró tras el partido un Love que comienza a estar frustrado por lo solo que se encuentra y la horrible marca de su equipo (10 victorias y 33 derrotas). "Mis estadísticas pueden ayudar, pero tiene que haber un esfuerzo de todos, desde el cuerpo técnico hacia abajo", remató el oro mundialista en Turquía.

Con estos 29 dobles-dobles seguidos Love aspira a batir el récord de los últimos 40 años que tiene Kevin Garnett con 37. Más difícil tendrá alcazar el tope absoluto: los 60 de Elvin Hayes en la 68-69. En lo que va de temporada, el de Minnesota lleva 38 en 43 partidos, líder de la competición por delante de Griffin (33), Howard (20), Randolph (28) y Pau Gasol (25). Aquí nadie podrá igualar al gran Wilt Chamberlain, que en varias temporadas hizo un doble-doble en todos sus partidos. Eran otros tiempos en los que los ágiles 2,16 de Wilt parecían provenir del futuro, un coloso enorme entre pequeños humanos.