FUENLABRADA 72-REAL MADRID 86
Llull tiró de un Madrid que venció con dificultad
Los de Messina sufrieron más de lo que indica el marcador en el derbi madrileño.
El Real Madrid, comandado por un espléndido Sergio Llull, confirmó en Fuenlabrada su papel de favorito en el partido de rivalidad regional aunque venció con más apuros de los que señala el resultado final (72-86).
El equipo madridista, cuya única y remota opción de acabar segundo la primera fase de la competición pasaba por ganar en el pabellón ''Fernando Martín'' (la victoria del Caja Laboral lo impidió), hizo valer su calidad y resolvió en el último cuarto el igualado e intenso partido propuesto por los locales. El mejor porcentaje en tiros de dos (57 contra 38) de los jugadores dirigidos por Ettore Messina y la superioridad en el rebotes (38 contra 25) fueron determinantes.
La actuación del base menorquín Sergio Llull fue el definitivo e insalvable escalón que impidió al Fuenlabrada ganar el partido. Una imagen del internacional palmeando un tiro elevándose por encima de propios y rivales escenificó con claridad lo que sucedió sobre el parqué. Llull jugó a una marcha más que el resto de sus compañeros y sólo Felipe Reyes puede situarse jerárquicamente a su altura.
El balear acabó el partido con 20 puntos (máximo anotador del encuentro) y 21 de valoración (el más valorado), pero, sobre todo, contagió a los suyos de una energía descomunal en los momentos más complicados. La labor ofensiva de Reyes, los rebotes de Ante Tomic, los puntos de Bullock y los buenos pases de Marko Jaric hicieron el resto.
El Fuenlabrada de Salva Maldonado se vació. Ganó el primer parcial con un gran Tal Burstein, (26-23) sobre todo cuando el alero israelí se enfrentó a Nole Velickovic, mandó en algunas fases del partido y no cedió hasta el minuto 35, cuando cuatro puntos seguidos de Lllull y un triple de Reyes pusieron en el luminoso una distancia insalvable (62-70).
Con Burstein sin gasolina, el pívot italo-argentino Leo Mainoldi lejos del acierto exhibido hasta el tercer cuarto y el capitán Ferran Laviña también más desacertado que al principio , el equipo local firmó una derrota injusta por lo abultada.
Las últimas incorporaciones madridistas tuvieron distinta valoración: el pívot belga Thomas Van Den Spiegel jugó muy poco y el alero estadounidense Morris Almond no tiró apenas y sólo anotó dos tiros libres con el partido sentenciando.