El entrenador del Real Madrid, Ettore Messina, no escondió que estaba "muy contento" por disputar su primera final con la entidad madridista, pero sobre todo porque en estos tres días se ha podido ver a "un equipo".
"Estamos muy contentos porque hemos ganado un partido muy importante ante un gran equipo y además fuera de casa. Estamos contentos por nuestros aficionados que han venido a ayudarnos. Hoy me parecía que era normal que siendo en Bilbao era fuera de casa porque había mucha gente de Baskonia", señaló. Por eso quiso destacar que el buen trabajo de los suyos. "Han jugado fuera de casa con una afición que animaba muchísimo y lo han hecho 40 minutos a un nivel continuo y son cosas que nos ha dado mucha alegría", subrayó.
"Tras una vida de baloncesto, estoy contento porque mañana juego una final por primera vez con la camiseta del Real Madrid y es un honor. Además porque el equipo desde todo el año ha sufrido mucho, hoy y ayer han jugado como un equipo con continuidad y sobre todo que hayan jugado mejor. Hemos jugado como debe de ser un equipo", destacó.
Y es que el italiano reconoce que está "muy feliz" porque ha "sentido al equipo". "Cuando hablan en la pista, se dan consejos, asumen su responsabilidad y hemos vivido dos días muy buenos, que creo que nos puede dar una idea de cual es el equipo. Los que han cambiado y han dado un paso muy fuerte adelante son ellos. Los protagonistas son ellos", subrayó.
De cara a la final, tiene claro que "no es un partido para preparar en 24 horas" porque se trata de un equipo "con una plantilla profunda y ya sabe qué es ganar". "Hoy hemos jugado ante un equipo fuerte físicamente que ayer parecía imparable. Vamos a jugar nuestras cartas, sabemos que son favoritos porque son campeones de la ACB, pero tenemos nuestras opciones. Tenemos que jugar con esta actitud porque tenemos opciones", reconoció.
Por último, Messina desveló que ahora están recogiendo los frutos de los últimos meses. "Hemos tenido problemas para acoplarnos porque nos hemos puesto mucha presión intentando dar el máximo. No soy una persona con mucha paciencia, es un defecto y he tenido suerte de que he tenido equipos que han tenido más paciencia conmigo que yo con ellos y eso nos da confianza", concluyó.
