"Aquí hay falta de sensibilidad por parte de la ACB"

No sé si andará usted con mascarilla...

(Risas) No, si he cogido la Gripe A, ya no hay remedio.

¿Están preocupados?

Hay dos jugadores en los que la fiebre parece que remite, pero otros cuatro muy fastidiados. Como esto dura dos o tres días, el partido contra el Gran Canaria debería aplazarse.

El peligro es que esto puede ir a más.

Hay miedo. No descarto que Granger o Caner-Medley, dos de los sanos, se contagien. Ellos están preocupados y yo estoy rezando para que no me llame nadie a las doce de la noche diciéndome que se va para el hospital.

Pese a sus informes, la ACB no ve razones para la suspensión.

Es un error por su parte. Ahí está el protocolo que ordena el Ministerio de Sanidad, que dice claramente que cualquier persona con síntomas de Gripe A debe mantenerse aislado en su domicilio.

Argumentan que ustedes no han presentado pruebas de que padecen la Gripe A.

Ese tipo de pruebas cuestan mucho dinero y sólo se le realizan a personas de riesgo. Aquí no interviene ese factor, es evidente, no hay diabetes o problemas cardiovasculares, pero el peligro es que podemos contagiarlo a los demás.

Ese riesgo es evidente.

Me pongo en la piel del Valencia y si sus jugadores empiezan con síntomas, ¿de quién es la responsabilidad? Hay falta de sensibilidad por parte de la ACB. Esto no es un catarro, debe aplazarse por razón de salud pública. Existe el riesgo de contagio a nuestros rivales, a quienes compartieron viaje con nosotros en tren, a los clientes del hotel...

¿Cuál es la solución?

El problema es que somos los primeros en sufrirlo con esta magnitud, porque pasará en fútbol o balonmano. Desde el Estudiantes se ha hablado con el Gran Canaria y sus jugadores están preocupados, porque tienen niños pequeños o mujeres embarazadas. No es para tomárselo a la ligera.