Cajasol, Granada, CAI Zaragoza y ayer, en el estreno del Torneo de la Comunidad de Madrid, el Alta Gestión Fuenlabrada. Son las cuatro víctimas del MMT Estudiantes en lo que va de pretemporada, en la que continúa invicto. Los colegiales han empezado la preparación con fuerza, como acostumbran los equipos de Casimiro, y con un bloque más compensado que el de la temporada pasada, en la que se salvaron del descenso en unas últimas jornadas de gran tensión, las más angustiosas de su historia.

El Fuenlabrada plantó batalla en la primera parte (32-29), mientras el gigante Peter Ramos dominaba las zonas (9 puntos y 6 rebotes al descanso). "Puede ser una de las sensaciones de la Liga", dice Luis Guil, su técnico. Sin embargo, las faltas y las pérdidas (7) lastraron al boricua. Se hundió y con él su equipo (Bueno y, sobre todo, Mainoldi no dan aún réplica). La defensa colegial ahogó al rival, sobre todo en el tercer cuarto. Jayson Granger -que cumple hoy 19 años- presionaba a Ferrán, penetraba y asistía (7 pases, 14 en los dos últimos partidos). Y Samo Udrih se destapaba con una racha de nueve puntos (21 al final). El esloveno ha reemplazado a su compatriota Lorbek. Le queda menos recorrido, pero es más sólido. El Estu, además, cuenta por fin con un cinco puro (Wideman).

El jueves los colegiales se jugarán el título ante el Madrid, aunque el Fuenlabrada mantendría opciones si mañana gana a los blancos de paliza.