Quedan dos jornadas para que concluya la primera fase y es ahora cuando asoma en el horizonte la Final Four. El Real Madrid se mide hoy en Francia, en Clermont-Ferrand, al Chorale Roanne con el objetivo de ganar por la mayor cantidad de puntos (104-73 en la ida). En juego, ser el mejor segundo de los tres grupos y, por lo tanto, cabeza de serie en el Top 16. Un primer paso para contar luego con la ventaja de campo en el playoff­ de cuartos, el último escalón antes de la final de Madrid. Matemáticamente los de Plaza pueden ser aún primeros, pero el Panathinaikos debe caer hoy y el siguiente jueves en Vistalegre. Para finalizar como cabeza de serie el Madrid debe ganar sus dos duelos (el traspié del Barça ayer abre una pequeña opción en caso de una derrota) y lograr un basket-average mejor que el del segundo del grupo B. De momento suma +100, mientras que el Lietuvos se dispara hasta +121 (aunque apunta a la primera plaza) y el Maccabi se queda en +32.

De salida el Roanne no bajará esta tarde los brazos porque mantiene opciones de clasificarse, aunque sean remotas. Y cuenta con el ala-pívot Marc Salyers, que querrá lucirse para dar el salto a la ACB o a otro gran campeonato continental la próxima campaña. Salyers fue el artífice del histórico título de Liga del Roanne el pasado año y en el torneo continental es la gran revelación junto a Pekovic. Marcha primero en anotación con 22,7 puntos por noche y segundo en valoración con el mismo promedio (23,7) que el líder, el lituano Macijauskas.