La derrota cosechada ante el equipo de Ploiesti ha sido la tercera de los españoles en la competición europea, tras las vividas en las pistas del Galatasaray y Hemofarm.

El conjunto de Pedro Martínez realizó un buen primer cuarto ante el Asesoft (15-17), aunque los cuatro primeros minutos del segundo resultaron clave, puesto que el equipo gerundense encajó un parcial de 15-2, que dejó el marcador en 30-19.

En el total del segundo cuarto el Akasvayu encajó treinta puntos y llegó a perder por 16, diferencia que al descanso quedó en catorce (45-31).

Los españoles lo intentaron en la segunda parte, con más empeño que calidad, aunque para entonces el Asesoft ya había tomado el mando del partido, sabedor el equipo rumano que si ganaba aseguraba la cuarta plaza del grupo.

El último intento por parte de los gerundenses por darle un vuelco al partido fue en el inicio del último cuarto, momento en el que se situó a seis puntos (60-54), a seis minutos para el final. Sin embargo, y a pesar de la gran actuación de Vroman, que acabó con 25 puntos, la victoria ya no se le escaparía a conjunto local que, sabedor de lo que se jugaba, sólo utilizó siete jugadores a lo largo de los cuarenta minutos.

La derrota del Kiev en la pista del conjunto alemán del Artland Dragons permite al Akasvayu no ser el peor primer clasificado de los nueve grupos, con lo que partirá cómo cabeza de serie en el sorteo de los dieciseisavos de final. Su rival para esta ronda estará entre un tercer o un cuarto clasificado.

A pesar de ello, la sensación dejada por el equipo de Pedro Martínez es que sufre mucho jugando en pista contraria y que en esta ocasión salvo su particular objetivo ''in extremis''.