La magia de Vistalegre, en peligro frente al Barça

Denis Marconato, que ya es un ilustre del AXA Barcelona y un buen conocedor de nuestro baloncesto, ha definido bien el choque de hoy: "Para el Madrid es ante todo una venganza, porque ya ha perdido dos veces contra nosotros esta temporada". En efecto: Plaza y sus jugadores han recibido sendos correctivos en sus dos últimas visitas al Palau: la de Euroliga, en noviembre (73-62) y la de Liga ACB, en diciembre (84-64). Y teniendo en cuenta que el Barça es siempre un rival directo para la batalla final por los títulos, al Madrid le urge replicar de inmediato, recuperar la confianza en sus posibilidades.

El cambio de escenario puede ser un factor importante para las ilusiones madridistas. En lo que va de temporada el equipo blanco ha ganado todos sus compromisos en el Palacio Vistalegre, 5 de Euroliga y 8 de ACB. Fue en este escenario donde el Real fraguó sus mayores éxitos de la campaña anterior, y donde confía en repetir en la actual. Es en Vistalegre donde Felipe Reyes rompe el corsé que le imponen fuera los pívots barcelonistas, donde Bullock burla el agobiante marcaje de Basile o Grimau, y donde los bases madridistas emergen ante sus rivales.

Claves.

En las dos confrontaciones previas Dusko Ivanovic le ha ganado la batalla táctica a Joan Plaza. Implacable en defensa e imparable en ataque, el Barça se impuso de modo rotundo. Ivanovic tiene asignado un defensor especial para cada jugador madridista y, hasta ahora, todos cumplen con eficacia su misión. Una vez bloqueada la ofensiva blanca el Barça se lanza al ataque con gran velocidad y confianza. El Madrid no ha encontrado aún respuesta para contener la transición arrolladora de Grimau y Trías. Y en ataque sistemático, cinco contra cinco, el Barça también impone el juego entre pívots (Marconato-Fran Vázquez), o los triples (Lakovic, Basile), siempre a partir de unos pick and roll que desequilibran la defensa merengue. De modo global, por lo tanto, el duelo podría calificarse como batalla de ritmos. Y para controlar el tempo de juego hay dos elementos cruciales: rebote y dirección. Trías, Marconato, Kasun, Grimau, Lakovic y Pepe Sánchez han brillado hasta ahora en esos cometidos.

Joan Plaza ha dicho que confía en la magia de Vistalegre, pero él y sus jugadores tendrán que 'inventar' otros recursos. Por ejemplo, confiar en un Sergio Llull casi olvidado desde noviembre. O animar a Papadopulos a que sea más resolutivo y no sólo haga labor de equipo.