ACB | MMT Estudiantes 74 - CB Granada 62
Estudiantes emerge de la mano de Perasovic
Larry Lewis, estrella en el triunfo sobre el Granada
Resucita Estudiantes. Perasovic cogió un equipo con promedios de 72-83 y ayer se impuso al CB Granada por 74 a 62. Es evidente que Peras ha iniciado la construcción por donde debía: los cimientos. O sea, la defensa. Si Potapenko mantiene su evolución (lenta, pero esperanzadora) y Morandais vuelve a la Tierra (está todavía en Saturno), mejorará también el ataque.
La mano sabia y tenaz del técnico croata también se nota mucho en dirección de partido y aprovechamiento de recursos. Dosifica bien la lucidez de Gonzalo Martínez, las rachas inspiradas de Larry Lewis (el hombre que mantuvo siempre al equipo) o Carlos Suárez (dos triples suyos salvaron el agarrotamiento final), y ha descargado de excesiva responsabilidad anotadora a Hernán Jasen, que vuelve así al trabajo sordo y valioso.
Era una final, porque Estudiantes no podía permitirse otra derrota en casa, y el equipo madrileño apretó firme desde el inicio, con un 10-0 en tres minutos que le aportó tranquilidad y confianza.
El Granada reaccionó (15-12, 29-27), encomendándose a Borchardt, al tiempo que el quinteto madrileño regalaba excesivos balones, con Sergio Sánchez al timón. Sin embargo no hubo vuelco en el marcador, porque el técnico estudiantil rotó bien a sus hombres, encontró en Larry Lewis al impulsor seguro, y Potapenko empezó a rendir en las zonas, no por los encestes conseguidos sino por las personales que forzó al bastión granadino, Curtis Borchardt. Cuando el pívot americano hizo la cuarta y fue al banquillo, Estudiantes abrió brecha de 25 puntos, dirigido nuevamente por Gonzalo y con excelente defensa. Un 62-37 sentenciaba el choque en el minuto 29, aunque el retorno de Borchardt motivó un 2-19 (64-56) y agobios que cortó Carlos Suárez. Adiós al farolillo rojo.