La quinta de Ricky Rubio también quiere ser de oro

Llegaron a nuestra redacción muy contentos, y había motivo para ello. Por la mañana habían ganado a Eslovenia (78-67), con lo cual han acabado invictos el torneo de Guadalix, completando una preparación impecable para el Campeonato de Europa: 13 amistosos, 13 victorias. Con la satisfacción del deber cumplico, y con la alegría de saberse fuertes, disfrutarán relajados los dos días que faltan para empezar el Eurobasket Sub-18, que se disputará en Madrid (Telefónica Arena) del 3 al 12 próximos. Ellos, de momento, se lo toman con calma. Tras la visita a AS se marcharon en bloque al cine. Les esperaban los Simpsons.

El seleccionador, Luis Guil, comentaba: "Los amistosos no son una referencia demasiado fiable, porque en los campeonatos oficiales se pone más tensión, pero creo que llegamos al Europeo en buena forma y con optimismo. Esta es una generación habituada a competir a gran nivel, y con bastantes medallas cosechadas ya en categorías anteriores. Iremos a por el podio". Los jugadores, con Ricky Rubio de estandarte, también son ambiciosos: "Queremos el oro", confiesan. Y añaden que no sienten la presión de salir como favoritos.

Estos júniors también quieren ser de oro, como Gasol y Navarro en el Europeo de 1999 (Bulgaria) o Sergio Rodríguez y Carlos Suárez en 2004 (Zaragoza). Ahora el gran referente es Ricky Rubio, el joven mago del Joventut cuya progresión vigila ya todo el planeta basket. Ricky causó asombro el verano pasado, en el Europeo cadete de Jaén, al conseguir 51 puntos, 24 rebotes 12 asistencias y 7 recuperaciones en la final ganada a Rusia, incluyendo un triple desde medio campo para forzar una prórroga imposible.

Aunque un año más joven que el resto de sus compañeros, Ricky es el líder de esta Selección. En la cancha asume responsabilidad. Fuera marca las reglas de las partidas de blackjack con las que amenizan las concentraciones. "El comienzo del Europeo será durísimo, porque estamos en el mismo grupo los tres mejores equipos", avisa.