El Unicaja recupera su esencia en el Carpena

El Unicaja dio un paso al frente en la Euroliga y derrotó al Partizan ante las 10.000 personas que abarrotaron el Carpena. Los serbios, un rival directo en la lucha por el Top-16, se vieron superados por la intensidad de los hombres de Scariolo. El equipo, que está llevando una marcha irregular, se mostró mucho más serio que en otras ocasiones, consciente quizá de la necesidad. No encajan todas las piezas, pero la guerra no está perdida. Aun sin el lesionado Marcus Brown, el Unicaja puede competir. Ahora necesitan sellar ante el Barcelona la resurrección en la ACB.

Dispuestos a olvidarse de sus males, los cajistas salieron centrados. Hacía tiempo que no daban la sensación de saber lo que estaban haciendo. En cinco minutos alejaron al rival a los diez puntos. La defensa subió el pistón, los triples entraron y no se perdieron balones absurdos. La faceta que no mejoró fue la reboteadora, pero al menos Santiago mantuvo a ralla al gigante Perovic. Con el viento a favor de los verdes, el Partizan hizo ademán de meterse en el partido, pero el Unicaja no se lo consintió. Los malagueños ahogaron al rival con una buena defensa y con Cabezas y Pepe al mando de las operaciones. Sólo el rebote ofensivo (18) mantuvo vivo al Partizán.