Un debutante noquea al campeón en su propia casa

El Unicaja encajó su segunda derrota ante un recién ascendido a la ACB, el Bruesa. Los de Scariolo, en plena fase de adaptación y esperando la inminente vuelta de Santiago, han arrancado en un mar de dudas. Mar Bruesa en el Carpena. Queda tanto trabajo por hacer, que sacar conclusiones sería precipitado e injusto. Aunque eso no justifica los numerosos defectos de los que está haciendo gala el Unicaja en este arranque.

El 2-0 anotado por Jiménez hacía presagiar una tarde tranquila, sin sobresaltos. Nada que ver con el esperpento de la primera jornada. El Bruesa no daba la sensación de poder atemorizar al campeón en su propia casa. Scariolo tiró de inicio con Pepe fresco, lógico después de varios días en la nevera, y Gulyas, que reclama el derecho a no ser despreciado antes de tiempo. La cosa medio funcionó gracias a ese todoterreno llamado Jiménez (9 puntos y 12 de valoración en el primer cuarto), pero Frisac se guardaba un as en la manga. Smith entró en escena para dar un empujoncito en el marcador a los suyos. Su festival se prolongó hasta el descanso. Scariolo rotó sobre él un ramillete de defensores, pero se fue con 15 puntos. Con disimulo, los vascos se despegaron más de lo permisible.

Tras el descanso, el Unicaja cambió el chip. Se puso el mono de faena. De su sudor, y del acierto desde el perímetro, nació la reconquista del terreno perdido. Los malagueños encestaron cinco triples que redujeron la desventaja a ocho tantos. Empujados por el Carpena, los de Scariolo siguieron pacientes el plan para derrotar al debutante. Pero el alma y el buen hacer de un novato en la ACB noqueó al Unicaja. La superioridad de la plantilla verde sólo sirvió para llegar a los últimos 20 segundos uno abajo (80-81). Tuvieron la última posesión, pero hasta tres veces fallaron.

Santiago firmará por dos años

El Unicaja confirmó ayer el regreso de Daniel Santiago para las próximas dos temporadas. El pívot boricua no ha encontrado hueco en la NBA y volverá a ser la referencia interior del Unicaja de Scariolo. El acuerdo es por dos años e incluye una opción de escape a la NBA a finales de la actual campaña. Santiago emprenderá viaje hacia Málaga en los próximos días para ponerse de inmediato a las órdenes de Scariolo. El gran damnificado, a priori, ha de ser Robert Gulyas. Su contrato expira el 5 de noviembre, pero, hasta entonces, el club seguirá contando con los servicios del húngaro.