Amistoso Selección | España 96 - Eslovenia 85
España ratifica su gran potencial ante Eslovenia
Siete partidos, siete triunfos. El viaje al continente asiático no ha alterado el buen juego nila solidez del equipo español, que debutó en el Torneo de Singapur con una convincente victoria frente a la notable selección eslovena. Calderón, Navarro y Garbajosa lideraron el recital.
Siete de siete. Lo único que nos impide pedir a gritos que se adelante el debut, que comience ya mismo el Mundial, es que Pau Gasol aún no ha logrado la puesta a punto. Los demás, perfectos. Eslovenia, un equipazo, pasó por la piedra española (96-85). Como el campeón del mundo, Serbia, y como el campeón olímpico, Argentina. Todos sabemos que los prolegómenos no hacen fiesta, que es en Japón donde toca bailar, pero este equipo gusta y se gusta, ofrece confianza.
Josevi Hernández, el últmo romántico, tiene la peregrina teoría de que los jugadores deben divertirse jugando, incluso en la alta competición. Sufrimientos, los menos, please. Por feliz casualidad tiene a sus órdenes un equipo que comparte filosofía. Porque estos júniors de oro devenidos en tigres depredadores disfrutan en las grandes batallas. No tienen miedo a nadie.
Insisto: Eslovenia, un equipazo. Lo demostró con 30 puntos en el primer cuarto. España flojeó en defensa y ellos hicieron alarde de fundamentos. Excelente juego interior, soltura en la transición y magníficos tiradores. España también brillaba en ataque, muchos contragolpes, gran circulación de balón, pero la mayor efectividad en los triples permitió a Eslovenia llegar un punto arriba al descanso (56-57).
Muy serio.
Fue en el tercer cuarto cuando España enseñó los colmillos, apretó en defensa e hizo presa en el cuello rival. Parcial de 21-13. Se habían acabado las bromas. A Eslovenia se le fundieron los plomos y España empezó a lucir como equipo ogro, felino implacable. Grandes minutos atrás y delante, con Calderón a la batuta y Navarro a la metralleta. Pepu reparte minutos con generosidad, pero tiene ya muchas tablas y ha hecho lo que todo entrenador debe hacer con un equipo: fijar el escalafón, definir quinteto titular. La Selección tiene un cinco de lujo que empieza a jugar de memoria. Calderón, Navarro, Jiménez, Garbajosa y Gasol. ¡Uff! ¡Qué difícil mejorarlo! Calidad, físico, ambición y experiencia. Lo mejor de todo es que ellos, como decía al principio, se gustan. Ese quinteto se sabe compenetrado, fuerte, capaz. Cuando Pau sintonice al máximo el recital puede ser magnífico.
Tomadas las riendas del choque en el tercer cuarto, España mantuvo su intensidad en el arranque del último periodo, hasta lograr una ventaja de 15 puntos (89-74). Robos y contragolpes seguían siendo el mejor arma, junto a las entradas a canasta (¡Calderón!), pero ya no faltaban los triples (Navarro, Garbajosa), junto a una espléndida circulación de balón. Nada de egoísmos. Para completar el manual sólo falta más juego entre pívots y más balones interiores a Pau, que indeciso en ataque se dedica más a pasar que a resolver. Mientras tanto disfrutemos con los alleyoops de Rudy. Una gozada. Ahora, nuevo test ante Serbia, que buscará revancha.