ACB | Unicaja 76 - DKV Joventut 61
Garbajosa, otra vez implacable con un batallador Joventut
Unicaja logró el 2-0 en la serie
Sacrificio extenuante en defensa, velocidad máxima en ataque y lucha a muerte en el rebote ofensivo. Era la única vía del Joventut hacia el milagro, consciente de que debía rendir al 120 por 100 si deseaba sorprender al Unicaja. Y nadie podrá reprochar a los hombres de Aíto que no lo intentasen, que no dejasen hasta el último gramo de energía en la búsqueda de aquellas consignas. Pero el Unicaja es sólido como una roca. No tiene fisuras. Aceptó el reto del juego vertiginoso y, tras un primer cuarto equilibrado (22-23), asestó un 16-2 demoledor en el arranque del segundo periodo: 38-25, min. 25.
Garbajosa (14 puntos en 11 minutos de juego) lideraba el rodillo verde, que esta vez apenas utilizó a Santiago, quien se cargó de faltas. Además la defensa verdinegra estaba orientada contra él, con traps en cuanto recibía dentro.
El partido estaba teóricamente roto, pero la Penya no arrojó la toalla, siguió peleando y aplazó la escapada final del Unicaja. El equipo malagueño, además, optó por administrar su renta, utilizando defensa en zona y serenando sus jugadas, con Pepe Sánchez controlando el ritmo de juego. El 2-0 estaba servido.