Las claves de Luis Casimiro

1. El Pamesa tenía como objetivo parar a Garbajosa. Lo consiguió y con ello tuvo medio camino andado en la primera semifinal de ayer. Cuando Garbajosa no estaba en cancha, los valencianos utilizaban la zona para frenar el juego fluido que hasta ahora había caracterizado al Unicaja. Ahí comenzó a cimentarse el triunfo del Pamesa.

2. Los postes. Lo que podía parecer un problema para el Pamesa, con la aportación de Santiago, se convirtió en un arma para los pívots del Pamesa y obligó a adaptarse al juego de postes pequeños al Unicaja, que incluso tuvo que utilizar en algunos momentos a Walter Herrmann de 4. Gran planteamiento de Ricard Casas y perfecta dirección de partido.

3. El efecto Erdogan. Ése fue el primer paso para que el Tau se hiciera con la semifinal disputada ante el Real Madrid. Erdogan estuvo en plan estelar en los triples, echó el balón al suelo y penetró. Fue la extensión de Perasovic: lo más parecido a lo que era el croata como jugador. Cuando acabó el efecto Erdogan, entonces surgieron Travis Hansen y Tiago Splitter, que acabaron de redondear el gran juego vitoriano.

4. La final. Sólo un deseo para el Tau-Pamesa que hoy pondrá colofón a esta Copa del Rey: que tenga un final apretado. Eso es lo que espera mucha gente, ya que hasta ahora todos los encuentros de este torneo se han resuelto por diferencias holgadas.