Euroliga | Real Madrid 85 - Partizan 68
Rakocevic se afirma como nueva estrella madridista
Tumbó al Partizán con un último cuarto memorable
El domingo se destapó ante el Breogán y anoche se reafirmó ante el Partizán. Los seguidores del Real Madrid ya tienen nuevo ídolo: Rakocevic, el aguerrido base serbio que ayer lideró nuevamente una genial reacción de su equipo e hizo vibrar a los aficionados del Palacio Vistalegre.
Victoria aparentemente fácil del Real Madrid (85-68) que pone fin a una racha negativa de tres derrotas en la Euroliga. Eso sí, triunfo con prólogo oscuro ya que el conjunto madridista estuvo ausente durante todo el primer periodo (12-22), se limitó a desperezarse en el segundo, con Rakocevic y Edu Hernández Sonseca (sí: el desahuciado Edu) de revulsivos y hubo que esperar al tercer cuarto para que el Madrid por fin mostrase su calidad, su garra y su potencial.
Defensa.
Tras el 35-40 con el que se había llegado al intermedio el Real Madrid apretó al fin los dientes en defensa y con un parcial de 13-3 logró su primera ventaja en el encuentro. Hervelle (el único que había logrado triples hasta el momento) y Felipe Reyes protagonizaron aquel tirón. Sin embargo, el Partizán no había dicho su última palabra. Vujosevic colocó de nuevo a sus hombres en zona 2-3 y el Real Madrid se estrelló ante aquella sencilla defensa. Como en el primer tiempo y a base de triples, el Partizán recuperó el aliento y al acabar el tercer cuarto las espadas seguían en todo lo alto (60-58).
Fue Rakocevic quien rompió definitivamente el encuentro. En cinco minutos explosivos, de auténtica videoteca, Rako destrozó la defensa rival a base de triples y entradas posibilitando un 17-1 de parcial, con 11 puntos suyos, que enterraron las esperanzas del conjunto serbio. En las gradas, un auténtico clamor, ovaciones a Rakocevic y partido resuelto con minutos de holgura suficientes para que Maljkovic diese minutos a los que casi nunca juegan. El Partizán, con mucha juventud, talento y centímetros, tiene un gran futuro pero, evidentemente, no es aquel memorable equipo campeón de Europa en el 92 con Djorjevic, Danilovic, Rebraca y otros genios en sus filas. Por su parte, el Madrid con el surgimiento de Rakocevic, parece al fin en la senda del triunfo.