"Hay cosas que ya no podré hacer"

"No temo los retos", confesó Jordan, de 38 años, en su primera aparición pública tras confirmarse su regreso a las canchas. "Pero debo ser paciente al principio. Los Wizards deben mejorar su marca de 19 victorias y 63 derrotas del año pasado, pero admito que sería una sorpresa si Washington fuera capaz de ganar 50 partidos esta temporada".

"Tengo que dejar que las cosas sucedan de forma natural y no esperen de mí que anote 40 o 50 puntos la primera noche", dijo Jordan. "Sé que me vais a estar comparando con el Michael de antes, con el de los seis títulos, pero eso no es algo que me preocupe. Si fracaso en el intento, no pasa nada, por lo menos lo habré intentado y estaré en paz conmigo mismo", explicó.

"Se supone que vivimos en América, un país libre, y que somos libres para elegir lo que queramos. Pues eso es lo que estoy haciendo. Sólo estoy intentando jugar al baloncesto. Si puedo hacerlo, genial. Si no, también será genial. Pero si fracaso nadie podrá quitarme los seis anillos que he ganado", comentó el ex jugador de los Chicago Bulls.

"Todos hablan de las partes negativas de mi vuelta al baloncesto, pero yo sólo quiero jugar a este deporte, no he cometido ningún crimen. Me gusta jugar, no me importa el dinero", confesó Jordan, que donará su sueldo a los familiares de las víctimas de los atentados terroristas del 11 de septiembre.

"No estoy andando a oscuras en esta aventura", apuntó el rutilante jugador de los Washington Wizards. "Sé de lo que soy capaz. También sé lo que la gente va a esperar de mí. Sé la presión que la gente me está poniendo. Si no estuviera convencido de que estoy preparado para volver no lo haría, pero sé que hay cosas que antes podía hacer y que ahora no podré", explicó Jordan, que debutará el 30 de octubre frente a los Knicks de Nueva York en un marco realmente incomparable: el Madison Square Garden.