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Un sargento de la Legión salva a una Policía de ser estrangulada con un ‘mataleón’

Los hechos ocurrieron de madrugada en Sevilla. El agresor, corpulento, fue inmovilizado por el sargento, que se encontraba cerca de la zona.

Un sargento de la Legión salva a una Policía de ser estrangulada con un ‘mataleón’
Ejército de Tierra

El sargento 1º Serrano, del Tercio ‘Duque de Alba’, se vistió el pasado día 28 de enero de héroe. Gracias a su afortunada intervención salvó la vida a una agente de la Policía Nacional de ser estrangulada en Sevilla por un hombre de gran corpulencia. Los hechos ocurrieron sobre las 6:45 horas de la madrugada en la avenida de Kansas City de la capital sevillana.

Serrano, que se disponía a viajar a Madrid para realizar un examen, escuchó la voz de una mujer pidiendo ayuda, apenas a unos 200 metros del lugar en el que estaba aparcado su vehículo, cerca de la estación de tren de Santa Justa. Sin dudarlo, acudió a la llamada de auxilio y comprobó cómo un individuo estaba asfixiando a una oficial de la Policía Nacional con la técnica ‘mataleón’.

El compañero de patrulla trató de reducir, sin éxito, al agresor, por lo que pidió refuerzos por radio. Tras presenciar la escena, el militar se lanzó sobre el atacante y consiguió liberar a la Policía Nacional, rompiendo el triángulo de fuerza que el agresor ejercía sobre ella. Tras esto, un vigilante de seguridad que se encontraba en la zona le ayudó a recoger a la agente, que estaba inconsciente.

Mientras tanto, el sargento Serrano se situó encima del agresor para inmovilizarlo a la espera de que llegaran varios vehículos de la Policía Nacional para detenerlo. Actualmente, Serrano se encuentra en Talarn (Lérida) haciendo el curso de Actualización para el Ascenso a Brigada. Según explica, se guio por los valores militares para actuar de la forma en que lo hizo. Gracias a sus conocimientos en artes marciales logró liberar a la víctima.

Técnica del ‘mataleón’

Esta técnica consiste en sorprender a las víctimas por la espalda, pasando el brazo por su cuello para realizarles un estrangulamiento hasta hacerles perder el conocimiento, al interrumpir el riego sanguíneo que va al cerebro. Es entonces cuando el agresor aprovecha para robar las pertenencias de la víctima. Normalmente, el agredido no llega a ver cómo es la persona que le realiza esta técnica, pues son sorprendidos por la espalda. De este modo, no se pueden aportar apenas datos sobre los agresores.