Crece la tensión en Oriente Medio
Israel ha respondido al lanzamiento de cohetes desde territorio libanés de la misma forma, en busca de posiciones de Hamás y responsabilizando a grupos palestinos.
Aunque las hostilidades entre el Estado de Israel y la República Libanesa cesaran en 2006, las tensiones entre ambos países jamás han dejado de latir con dureza en una región donde la paz es casi una quimera. En los últimos años se han intercambiado denuncias en un fuego cruzado de acusaciones y sangre, bajo la atenta mirada de Irán, Siria y Jordania; todos pendientes de quién reabre un conflicto que, realmente, jamás se ha cerrado.
Israel acusa a grupos palestinos
Hoy el Ejército israelí ha lanzado un ataque contra diferentes posiciones del movimiento islamista Hamás en el sur del Líbano; posteriormente ha buscado el mismo objetivo con una serie de bombardeos en la Franja de Gaza. Así ha sido la respuesta a los 40 cohetes lanzados ayer por el país del norte y los otros nueve proyectiles disparados desde Palestina. Todos cayeron en territorio israelí. “Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) atacaron objetivos pertenecientes a la organización terrorista Hamás en el sur del Líbano”, ha confirmado un portavoz del Ejército. Además, ha advertido de que no se permitirá al grupo palestino la libertad de “operar desde el interior” de las fronteras libanesas.
La ofensiva israelí es la respuesta al bombardeo lanzado ayer por Líbano, que fue el mayor ataque desde territorio libanés desde, precisamente, la guerra de 2006. Desde Israel apuntan a grupos palestinos como responsables; no obstante, señalan directamente a la República Libanesa por permitirlo, ya que, según ha detallado el portavoz militar, es “responsable de cada agresión que emane desde su territorio”.
Más cohetes en la franja de Gaza
A esta réplica militar hay que sumar la continuación de los ataques en la franja de Gaza durante la madrugada del jueves. Desde el Ejército, han justificado estos bombardeos como una legítima defensa y un acto de seguridad ante la amenaza que estaban viviendo los últimos días. “Esta mañana, tras la continuación del lanzamiento de cohetes desde la Franja de Gaza hacia Israel, los tanques y aviones de las FDI atacaron puestos militares de la organización terrorista Hamás a lo largo de la frontera”, ha concretado el mismo portavoz.
No queda ahí: previamente ya habían anunciado ataques sobre sitios de fabricación de armas y túneles, todos supuestamente pertenecientes a la misma organización palestino-yihadista que controla el poder en el enclave fronterizo.
La respuesta de Hamás
Todavía no se ha precisado la cantidad de cohetes que han volado desde Gaza hacia Israel durante esta madrugada. Desde el Ejército israelí señalan ambiguamente que son “múltiples”, pero los medios locales los cuentan por encima de 40. Mediante un comunicado posterior a los bombardeos, Hamás ha acusado a Israel por llegar a este punto de tensión: “Hacemos totalmente responsable a la ocupación sionista por la peligrosa escalada y la flagrante agresión contra la Franja de Gaza y nuestro orgulloso pueblo palestino”. Bajo un manto que predice un futuro tan peligroso como incierto, sentencia: “Y por lo que sucederá en la región”.
Desde Hamás han querido recordar también los enfrentamientos entre la Policía israelí y los fieles musulmanes en la mezquita de Al Aqsa, en Jerusalén, que terminaron con más de 350 palestinos detenidos y una treintena de heridos. Esta fue la chispa que encendió el fuego de los cohetes que la noche posterior han dado luz al intercambio de misiles en la frontera.