Rusia toma el control de los grupos Danone y Carlsberg

En un movimiento sorprendente y de gran repercusión en el ámbito empresarial, Rusia tomó el control de las acciones de dos destacados grupos internacionales: Danone y Carlsberg. Estas adquisiciones estratégicas han generado un gran revuelo en el mundo de los negocios y plantean importantes implicaciones tanto para las empresas afectadas como para la economía global.

Según este decreto firmado por el presidente de Rusia, Vladímir Putin, el 98,56% de las acciones de la cervecera rusa Baltika, perteneciente a Carlsberg desde 2008, y decenas de miles de acciones pertenecientes a Danone se colocan “temporalmente” bajo el control del estado ruso.

Particularidades

A finales de junio, la cervecera danesa Carlsberg anunció que había encontrado comprador, sin nombrarlo, para sus actividades en Rusia, más de un año después de anunciar su retirada del país tras la ofensiva rusa en Ucrania, iniciada hace más de un año.

Según la información publicada en la página web de las cervezas Baltika, la empresa tiene unos 9.500 empleados y es una de las corporaciones más grandes del país. Más concretamente, sus productos se exportan a 79 países.

Con todo ello, el decreto especifica de manera contundente que 83.292.493.000 acciones de Danone Rusia, propiedad del grupo Produits Laitiers Frais Est Europe, se colocan bajo el control del Estado ruso, así como otras 85.000 acciones pertenecientes al grupo Comercio Danone.

Impacto en la competencia empresarial

Cabe destacar que el grupo multinacional de alimentos y bebidas, Danone, es conocido por sus marcas icónicas como Activia y Evian y ha tenido una presencia destacada en el mercado global durante décadas. Sin embargo, con esta inesperada adquisición, Rusia podría buscar su fortaleza en la influencia de alimentos y bebidas, además de la expansión de su presencia en el mercado internacional y la certeza de un suministro estratégico de productos vitales.

Por otro lado, Carlsberg, conocido por sus marcas emblemáticas como Tuborg y Carlsberg, ha sido un competidor fuerte y respetado en el sector, por lo que esta toma de control tiene el potencial de alterar significativamente el panorama empresarial.

La toma de control de Danone y Carlsberg por parte de Rusia plantea interrogantes sobre las implicaciones geopolíticas y económicas de esta acción. Y es que podría tener un impacto tanto en la competencia empresarial como en la dinámica de los mercados internacionales, generando cambios en los flujos comerciales y en las estrategias empresariales a nivel mundial.