Los apellidos españoles descendientes de medievales
Muchos de estos predominan en la península ibérica, estando nueve de ellos en el top 10 de los más comunes de España
Los apellidos españoles que tienen su origen en la época medieval constituyen un valioso tesoro histórico que nos conecta con las raíces profundas de la Península Ibérica.
Estos apellidos, transmitidos de generación en generación, son mucho más que simples etiquetas; encapsulan siglos de historia, legados familiares y acontecimientos que datan de tiempos remotos.
¿Cómo podemos identificarlos?
Los apellidos españoles que terminan en “-ez” tienen su origen en el sufijo patronímico “-ez”, que indica “hijo de” en la lengua castellana medieval. El origen de este sufijo es desconocido, pero una de las teorías es que proviene del latín vulgar, que utilizaban el sufijo “-icium”.
En el caso de los apellidos, se agregaba al nombre del padre el sufijo “-ez” para formar el apellido del hijo, indicando así la filiación y estableciendo una especie de genealogía en el propio apellido.
Por ejemplo, si el nombre del padre era “Sancho”, el hijo podría llevar el apellido “Sanchez”, que significaría “hijo de Sancho”.
Los apellidos en cuestión
- Sánchez. Hijo de Sancho.
- Pérez. Hijo de Pere.
- Gómez. Hijo de Gome o Gomo.
- Hernández. Hijo de Hernando.
- López. Hijo de Lope.
- Rodríguez. Hijo de Rodrigo.
- Suárez. Hijo de Suero.
- Álvarez. Hijo de Álvaro.
- Fernández. Hijo de Fernando.
- González. Hijo de Gonzalo.
- Menéndez. Hijo de Menendo.
- Martínez. Hijo de Martín.
- Juárez. Variación de Suárez.
Los apellidos más comunes
Según el INE, el primer apellido que predomina en España es García, con casi un millón y medio de personas, pero del segundo puesto al noveno, todos son apellidos medievales. Rodríguez (926.207), González (921.956), Fernández (902.331), López (865.941), Martínez (828.051), Sánchez (813.023), Pérez (774.072) y Gómez (490.272).
Todos los apellidos terminados en “-ez” no son medievales
Es importante destacar que, aunque la regla general era la utilización del sufijo “-ez” para indicar la filiación, existen algunas excepciones y variaciones en los apellidos. Algunos apellidos no cumplen con esta regla, y también hay apellidos que derivan de otros sufijos o raíces lingüísticas, lo que añade aún más diversidad al panorama de los apellidos españoles.
Uno de estos apellidos sería Vélez, que, aunque su forma actual puede confundir, el apellido Vélez tiene un origen diferente. Proviene del árabe “balat” o “balāt”, que significa “ciudad” o “población fortificada”.