La razón por la que Buitoni suspende la producción de sus obleas para empanadillas: mercado negro y alternativas
La repentina ausencia de este producto ha abierto la puerta a un mercado de segunda mano donde se oferta esta popular masa a un precio mayor que el original.
Desde hace unas semanas no hay rastro de las tradicionales obleas para empanadillas de la marca Buitoni. Han desaparecido de las estanterías de los supermercados y tampoco hay forma de hacerse con un paquete de forma online. “Producto no disponible” o “Sin stock” son algunos de los mensajes con los que se encuentran los consumidores al intentar buscar esta famosa masa pero, ¿a qué se debe esta sequía?
La falta de existencia de este producto ha causado la alerta en redes sociales de multitud de consumidores. Tal fue el impacto social que tuvo esta noticia que Nestlé, propietario de la marca de empanadillas, se vio obligado a lanzar un comunicado el pasado 29 de abril, explicando la ausencia repentina de su popular producto.
“Lamentamos informar que actualmente estamos experimentando una falta de abastecimiento de harina que cumpla con nuestras especificaciones técnicas para garantizar las cualidades de nuestros productos”, aseguraba la marca. Esta escasez de harina ha llevado a la empresa a suspender su fabricación y venta durante al menos tres meses. No obstente, este no ha sido el único producto afectado, sino que las Minipizzas Buitoni también han visto cesada su producción durante un mes.
Puerta al mercado de segunda mano
A situaciones desesperadas, medidas desesperadas. Recientemente son muchos los amantes de las obleas que se han preguntado por redes sociales sobre la ausencia de esta particular masa, creando una mayor demanda ante tan poca oferta, por no decir nula. En los últimos días se ha hecho viral un anuncio en Wallapop donde se ofrece este producto a un precio sorprendente.
Se trata de un paquete de obleas para empanadillas de la marca Buitoni a un coste de 60€. “Masa de empanadillas de toda la vida, caducada hace menos de 30 días, de ahí su inmejorable precio”, explica el vendedor en su anuncio.
La repentina ausencia de este producto en los supermercados ha abierto la puerta a un mercado negro donde los afortunados que adquirieron uno de estos paquetes antes del cese de fabricación pueden aprovechar la oportunidad de revenderlos a un precio mayor. Aunque actualmente no hay mucha oferta de segunda mano, no se descarta la aparición de otros anuncios vendiendo estas cotizadas obleas.
Auge de otras empresas
No obstante, no todo son malas noticias. La desaparición temporal de la marca Buitoni permite que otras empresas dedicadas al sector de las empanadillas den el salto y ocupen esta vacante de cara a los próximos meses. Este ha sido el caso de La Napolitana, una empresa coruñesa que en las últimas semanas ha triplicado su producción de masa.
Según recoge La Opinión A Coruña, esta marca ha conseguido cautivar a un nuevo público sediento de este alimento, expandiendo así su dominio y aumentando su cuota de mercado. “No sé qué les habrá pasado (a Nestlé), si se debe a esa falta de suministro o si habrá otro motivo. Lo que sí se es que a nosotros nos vino fenomenal”, asegura el gerente Javier García en declaraciones recogidas por este periódico.
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