La nueva queja de los turistas británicos sobre las playas de Mallorca

Cada verano, Mallorca y otras localidades españolas se llenan de turistas extranjeros, entre los cuales destacan los ingleses y los alemanes. Según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), en 2023, Reino Unido y Alemania concentran una representación superior al 40% de las pernoctaciones de no residentes en julio.

Este número es aún más grande en Baleares, donde el verano pasado, el 90% de las plazas en hoteles fueron ocupadas por turistas británicos y alemanes. Sabiendo esto, no es novedad ver como cada año, algunos turistas de estas nacionalidades encuentran motivos de queja en sus respectivos destinos. Todos recordamos aquella mujer británica que se quejaba de que en Benidorm había demasiados españoles. Y es que, aunque no todas las quejas son así de surrealistas, es un elemento común cada verano.

Los británicos, los alemanes y los locales luchan por las tumbonas de Mallorca

En Mallorca, los turistas británicos se han quejado por la “escasez de tumbonas” en muchas de las grandes playas de la isla, algo de lo que ya habían avisado los hoteleros de la zona, preocupados porque no hay suficientes tumbonas o servicios similares en época alta vacacional.

Según el diario The Majorca Daily Bulletin, las playas de Cala San Vicenç, Albercuix y Tamarells, en Pollensa, carecen de tumbonas y sombrillas adecuadas para proteger a los turistas del sol, por lo que estos buscan otras opciones en otros complejos turísticos.

Otro elemento común cada verano son las luchas en cada playa y piscina por conseguir los mejores sitios. No es raro ver en redes sociales vídeos de las ‘avalanchas’ que se producen a primera hora de la mañana debido a las extrañas batallas entre los bañistas para reservar sombrillas y tumbonas. Los lugareños afirman que se ven obligados a reservarlas al amanecer, dejando sus toallas o pertenencias, ya que muchos visitantes extranjeros madrugan para marcar su territorio.

Jaume Salas, representante de los hoteleros de la ciudad, se quejó de este fenómeno y manifestó que: “Las familias, que vienen con niños y con personas mayores, quieren poder tumbarse en una tumbona y disfrutar de un poco de sombra. Muchos de los usuarios han optado por ir a Alcudia, por todas las comodidades que ofrece su playa”. Aun así, Salas añadió que el alcalde, de Pollença, Martí March, es “consciente de la situación” y está apoyando a los hoteleros locales y trabajando para buscar una solución.

Los turistas alemanes empezaron a llevar a cabo esta práctica en las piscinas de los hoteles y complejos privados, pero ahora se ha extendido a las playas. Esto no solo molesta a los locales, sino también a los turistas británicos. Este fin de semana, más de una docena de plazas en la playa, cerca de un importante hotel en la Playa de Palma, muy apreciado por los turistas alemanes, han sido ocupadas antes de tiempo, según muestran fotos en medios locales.

El Ayuntamiento de Palma ofrece servicio de alquiler de hamacas y sombrillas en la playa a través de una empresa externa. El personal comienza a preparar y distribuir las tumbonas desde las 8:30 de la mañana, y el servicio comienza a las 10:00 y termina a las 19:00 horas, con tarifa diaria para los turistas.

El mes pasado, turistas británicos en Benidorm fueron acusados de intentar “acaparar” tumbonas llegando a la playa desde las 6 de la mañana para asegurarse un lugar. Al final, todos se acusan entre todos, y a falta de una regulación más seria, las tumbonas y demás servicios seguirán siendo para los más madrugadores, sin importar su nacionalidad.

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