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SOCIEDAD

La NASA revela cómo ha afectado la sequía a España

La agencia norteamericana muestra, a través de una comparativa de dos imágenes, cómo ha cambiado la vegetación en el último año, especialmente en el sur.

NASA
NASA Earth Observatory

Las fuertes lluvias que están cayendo en algunos puntos de España están ayudando, en parte, a aliviar la complicada situación de los embalses nacionales. Un invierno y un inicio de la primavera muy seca han provocado que se encuentren en niveles mínimos, dando lugar a restricciones de agua en algunas regiones y con el consiguiente problema para las próximas cosechas. Y es que, desde el inicio del año hidrológico (1 de octubre de 2022), ha llovido un 28% menos de lo esperado hasta la fecha.

La situación en gran parte de la geografía es tal que incluso se puede observar en una comparativa vía satélite. De hecho, la NASA ha tomado como referencia una imagen de cómo estaba en mayo del año pasado y la ha comparado con una actual. Ambas, recogidas por el espectrorradiómetro de imágenes de resolución moderada (MODIS) del satélite Terra, dejan ver cómo donde había una verde vegetación en 2022 hay ahora un tono marrón. Sin apenas vida.

Las lluvias, casi inexistentes en los últimos meses salvo en ocasiones puntuales, no hicieron sino resecar todavía más unos suelos que ya estaban inusualmente secos en 2022. De acuerdo con un estudio reciente de Copernicus Climate Change Services, la humedad del suelo en Europa fue la segunda más baja de las últimas cinco décadas.

El calor agrava la situación

Y si además de no llover apenas llega un episodio de calor extremo ya en el mes de abril, “apaga y vámonos”, que diría aquel. El 26 de abril se alcanzó la temperatura récord para dicho mes, registrada en Córdoba con 38,8 °C. En otro mapa compartido por el Observatorio terrestre de la NASA se observa cómo desde mitad hacia abajo de la Península hay un nivel de vegetación “menos saludable de lo habitual” en la presente primavera.

“En España, una sequía tiñe de marrón la mayor región productora de aceite de oliva del mundo. El satélite Terra de la NASA muestra dónde la vegetación era verde en mayo de 2022 y se volvió marrón en mayo de 2023. La sequía secó los embalses, secó los olivares y provocó restricciones de agua”, añade la agencia estadounidense. Así, en estas zonas marrones, se presentan anomalías en el Índice de Vegetación de Diferencia Normalizada (NDVI), con el que se miden las condiciones de la vegetación.

Cómo se mide el NDVI

Este marcador se vale de la cantidad de luz roja e infrarroja cercana que reflejan las hojas. A mayor “verdor”, la vegetación será más saludable y reflejará más luz infrarroja y menos luz visible. En el siguiente mapa aparece la comparativa de esta característica en el periodo del 25 de marzo al 23 de abril con el promedio a largo plazo (entre 2000 y 2010).

“La región de Andalucía en el sur de España es la región productora de aceite de oliva más grande del mundo. Al 19 de mayo, el aeropuerto de Córdoba (la estación meteorológica) solo había recibido alrededor del 30 por ciento de las precipitaciones esperadas, en comparación con el promedio de 1981-2010. De manera similar, llovió escasamente en Jaén, conocida por su aceite de oliva virgen extra producido a partir de la variedad de aceituna Picual”, señala. Por último, destaca que desde la región de Jaén se produjo el 25% del suministro mundial de aceite de oliva en 2022.