Hallazgo histórico en Burgos
Se ha descubierto una iglesia visigoda mientras se realizaban las excavaciones en Olmillos de Sasamón. Esta iglesia se encuentra dentro de un “amplísimo” conjunto de época romana junto a otros edificios.
No es extraño leer los periódicos o ver las noticias y encontrar un nuevo hallazgo histórico perteneciente a otras épocas de nuestra historia en cualquier parte del país o del mundo. De hecho, no ha pasado tanto desde que se descubrió en Cullera unos lingotes datados en el siglo I a.C. -durante el Imperio Romano- u otros yacimientos arqueológicos que han salido a la luz gracias -y por desgracia- a la sequía del último tiempo.
Ahora, el punto de mira se encuentra en la localidad burgalesa de Olmillos de Sasamón después de que el equipo de arqueólogos de Roman Army EU descubriese una iglesia visigoda incluida dentro de un amplio conjunto de época romana que incluía, además, al menos 13 edificios.
Las excavaciones tuvieron lugar entre el 8 y el 25 de agosto bajo la dirección de Jesús García Sánchez (Instituto de Arqueología, Mérida-CSIC-Junta de Extremadura) y José Manuel Costa-García (Universidad de Salamanca) y formó parte de campañas arqueológicas que también se centró en obtener información sobre la ciudad romana de Segisamo.
Las primeras hipótesis
Sobre la historia y el contexto de este hallazgo se cree que la construcción de la iglesia se remonta a los siglos VI y VII a.C. y se le encuentran ciertas similitudes a la también burgalesa Santa María de Mijangos, consagrada en el año 601. De hecho, este descubrimiento puede ayudar a conocer una nueva fase de la ocupación de la mencionada ciudad de Segisamo y que, además, ayuda a aportar nuevos datos en el estudio de la implantación del cristianismo en la Meseta y también de los roles que jugaron tanto obispos visigodos como aristócratas en su difusión por el medio rural.
Entre el conjunto arqueológico hallado se ha resaltado un mansio, una especie de posada cuyo objeto era el reposo, la alimentación y el cambio de caballos. Incluso se ha identificado un conjunto de viviendas construidas alrededor de un peristilo de 1200 metros cuadrados.
Características de la iglesia
Sus dimensiones son de 8 por 14 metros y tiene una orientación ONO-ESE. El cuerpo central está compuesto por una parte abovedada de 4,5 m de luz en el lado sureste. Asimismo dispone de dos espacios anexos: al norte, un posible baptisterio y, al oeste, un nártex -especie de basílica romana-.
Las siguiente fases de la excavación
A través de dos sondeos, el siguiente paso es estudiar los restos de la ciudad romana segisamonense para estrechar el cerco del contexto histórico y social en la época. No obstante, este tipo de excavaciones, cuando se trata de ciudades, son más complicadas debido a su paso por distintas fases tanto de esplendor como de declive o reocupación, por lo que la clave para resolver el enigma arqueológico se encuentra en el rescate de cualquier material usado en esa época.
Hasta el momento los restos de al menos siete personas han sido identificadas en sencillas fosas según el rito cristiano.
Gracias a la tecnología
Como gran avance de nuestra época, la tecnología ha sido protagonista y, además, ha sido esencial en este hallazgo ya que el equipo de arqueólogos ha utilizado distintas técnicas de teledetección como drones y también de prospección geofísica como el georradar para así obtener planos muy precisos de las ruinas. De la misma manera, la fotografía aérea ha tenido un gran papel, pues ha permitido documentar las estructuras del complejo.
El equipo de arqueólogos y las excavaciones seguirán su curso en 2024 con el fin de completar la investigación sobre las mencionadas primeras fases de ocupación de la ciudad romana de Segisamo.