Esther Sánchez, sobre el incendio en Burro Canaglia: “La decoración final debe ajustarse a la normativa”

Tragedia. Una palabra que describe a la perfección lo sucedido el pasado viernes 21 en el establecimiento italiano ‘Burro Canaglia Bar&Resto’ de la plaza de Manuel Becerra de Madrid, en el distrito de Salamanca, cuando al flambear un plato uno de los camareros se generó una llama que llegó al techo del establecimiento. El fuego se propagó por el techo de manera muy rápida, así como por las paredes, que estaban cubiertas de plantas artificiales.

Las investigaciones judicial y administrativa siguen abiertas y uno de los elementos que las centra es la decoración del local al estilo amazónico con plantas de plástico altamente inflamables. Otro elemento sobre el que se discute es que el local no tenía salida de emergencia, aunque el Ayuntamiento de Madrid ya ha aclarado que no era necesario porque el aforo no era suficiente para ser obligados a tener una salida de emergencia.

“El diseño de interiores no es un hobby”

Los expertos aseguran que los proyectos de interiorismo para hacer más atractivos estos locales de ocio buscan cada vez más sorprender a los comensales y ahí es posible encontrar los primeros fallos de diseño. “No suelen ser decoraciones respaldadas por un proyecto de interiorismo, sino que suelen ser intervenciones ‘domésticas’ acometidas por los propietarios de los establecimientos o por personas con conocimientos de decoración, pero no profesionales del sector con la formación adecuada. El diseño de interiores es un grado de cuatro años de duración y no un hobby”, exhibe la decana del Colegio Oficial de Decoradores y Diseñadores de Interior de Madrid (CODDIM), Esther Sánchez Lastra, al Diario AS.

Una temática que preocupa en demasía a esta experta, la cual afirma que “la decoración final de los locales debe formar parte del proyecto y ajustarse a la normativa”. Para llevar a cabo un tratamiento correcto de las plantas artificiales o flores secas, Sánchez Lastra revela que hay tratamientos específicos para hidratar las preservadas e ignifugar las plantas artificiales y cualquier elemento decorativo. Una vez dado, existen documentos que así lo certifican y garantizan el funcionamiento de ese tratamiento.

El principal error

Pese a insistir en que desconoce quién es el responsable de esta decoración, asevera que detrás del proyecto de este local “hay un estudio serio y profesional de arquitectura” que no es responsable de la intervención posterior con plantas decorativas. “Es muy habitual que este tipo de decoraciones las hagan los propios propietarios con posterioridad o personas que se presentan como profesionales del interiorismo sin serlo”, puntualiza esta experta.

En escasos segundos, el pánico se apoderó de la situación, el local se llenó de un humo espeso y los clientes comenzaron a gritar y a pedir auxilio, mientras intentaban salir del local. Sin embargo, esto fue una misión imposible ya que la gente atrapada no podía salir por el fuego y el humo que había en la puerta. Todo ello provocó el fallecimiento de dos personas y una decena de heridos de diversa consideración.

¿Qué debo hacer si quiero hacer una reforma o abrir un local?

Sin duda alguna, en caso de haber existido un tratamiento de ignifugación el resultado habría sido diferente. Por todas estas circunstancias, toda aquel que quiera hacer una reforma o abrir un local debe recurrir a un diseñador de interiores que vise el proyecto y sea respetuoso con la normativa, tal y como manifiesta Sánchez Lastra.

“Además de contratar estudios de arquitectura y/o interiorismos profesionales, de visar y notificar las intervenciones que se hagan en el local, cuando se hacen intervenciones nuevas, cambios o ampliaciones hay que notificarlas a la Agencia de Actividades del Ayuntamiento, que tiene un servicio de inspección y recurrir siempre a técnicos competentes”, concluye la decana del CODDIM.